El extremo Cardoso, que lleva 14 goles con el Fabril, anotó su segundo «hat trick»
24 mar 2015 . Actualizado a las 09:19 h.Cuando un equipo funciona como tal, las individualidades también brillan con luz propia. Ese es el mérito de Manuel Mosquera, entrenador del Fabril, que además de tener al equipo clasificado en la tercera posición, está consiguiendo que algunos jugadores destaquen y llamen a la puerta del primer equipo.
El caso más llamativo de todos es el de Cardoso, un extremo que puede actuar por las dos bandas, aunque en el Fabril suele hacerlo siempre por la izquierda. El viernes, en su partido ante el Silva, anotó su segundo hat trick de la Liga para elevar hasta los catorce su cuenta total en el presente campeonato. En el último lustro, solo un centrocampista había conseguido marcar más goles que él con el filial (Juan Carlos Real acabó la 11/12 con 16).
«Es una satisfacción enorme. Contra el Silva conseguí mi segundo hat trick de la Liga y me siento muy bien por ello. Pero esto es gracias al equipo, que me ayuda mucho. Me han dado mucha confianza», destaca el futbolista portugués.
Miguel Filipe Nunes Cardoso es el expreso de Sintra, villa lisboeta en la que nació hace 20 años (19 de junio de 1994). A él también le está sorprendiendo su extraordinaria eficacia. «La verdad es que para un extremo, catorce, son muchos goles. Pero espero marcar más para que el equipo pueda certificar la fase de ascenso cuanto antes (es tercero con 7 puntos de ventaja sobre el quinto). Lo más importante aquí es jugar el play off y poder ascender», añade.
Ambicioso
Cardoso mide 1,76 metros y pesa 71 kilos. Firmó por el Dépor en enero del 2014, procedente del Real Sport Clube (equipo en el que también jugó Salomão). Fue el equipo desde el que dio el salto a sénior. Con anterioridad jugó en el juvenil del Casa Pla (11/12) y en los cadetes del Benfica (09/11).
La pasada campaña empezó a destacar en la segunda vuelta con el filial blanquiazul (1.016 minutos y 2 goles), pero es en la actual en la que está destapando el tarro de las esencias. Es el máximo goleador del equipo, a pesar de que se perdió cuatro partidos por lesión. «El entrenador me da mucha confianza y además ahora estoy más que adaptado a la ciudad y al equipo», confiesa.
Cardoso está plenamente integrado y comprometido con alcanzar el ascenso con el Fabril, pero se le dibuja una sonrisa cuando se le menciona la posibilidad de debutar en Primera. «Subir al primer equipo es mi objetivo personal. No sé cuándo, pero espero conseguirlo algún día». Prometido queda.
Velocidad, disparo lejano e inteligencia, sus virtudes
Cardoso es un extremo potente, con buena condición física y certero golpeo de balón (usa las dos piernas). En Tercera División, al menos, ha demostrado tener mucho gol y, como prueba de ello, la gran variedad a la hora de conseguirlos.
El extremo portugués puede sorprender por velocidad, tal y como lo hizo el pasado viernes en el cuarto gol contra el Silva. El jugador arrancó en campo propio y le ganó la partida a su lateral para quedarse solo ante el portero. Lo mismo hizo en el partido del Arousa, en A Lomba, con una explosiva carrera de 80 metros (en el minuto 91) que culminó regalándole el tanto a Jorge Fernández. Un gesto de enorme solidaridad.
Otra faceta en la que destaca Cardoso es en el golpeo desde la frontal. Ante el Silva colocó el balón en la escuadra (era el 3-0) y contra el Pontevedra marcó con un lanzamiento esquinado. También el Alondras sufrió en sus carnes los latigazos del jugador lisboeta, en este caso con un lanzamiento desde más de treinta metros.
Por último, el siete del Fabril (antes actuaba con el once) también destaca por su inteligencia para aparecer en el momento adecuado. Marcó goles como si fuera un nueve, girándose y batiendo al meta (como contra el Ribadeo); o apareciendo por sorpresa en el segundo palo. Los centros de Adrián o Toni Insua siempre encuentran rematador.
Así marca los goles
Desde fuera del área. Contra el Alondras soltó este fuerte latigazo con la derecha desde 30 metros que dio en el larguero antes de entrar.
Con grandes galopadas. Ante el Silva, arrancó en velocidad desde campo propio haciendo gala de una potente zancada y se plantó solo ante el portero.
Aparición en el segundo palo. También contra el Silva, demostró que sabe rematar de cabeza. Siempre aparece por sorpresa en el segundo palo.
Con sangre fría. Ante el Ribadeo, aprovechó un balón muerto en el área para girarse y marcar con la pierna izquierda. Gol de killer.