El Ribadeo ya tuvo que aplazar dos partidos y ayer jugó de prestado en Foz ante el Bergantiños porque su estadio se inunda con facilidad
02 feb 2015 . Actualizado a las 00:57 h.Ayer se vivió otro domingo sin fútbol en el Pepe Barrera. De un tiempo a esta parte el estadio del Ribadeo cierra por inundaciones cuando las lluvias no dan tregua. En la presente campaña ya fueron aplazados dos partidos y ayer el equipo de A Mariña tuvo que trasladarse al municipio vecino de Foz para atender su compromiso con el Bergantiños. Tres horas antes del encuentro y después de comprobar de primera mano las condiciones del terreno de juego del recinto municipal ribadense, el colegiado santiagués García Martín, que estuvo acompañado por el presidente anfitrión, Víctor López, y el delegado federativo en Lugo Carlos Méndez, ordenó llevar la cita al recinto alternativo que había presentado el conjunto local como medida de prevención.
El problema no es nuevo para el único club mariñano en Tercera División. La pasada campaña en Preferente ya fue víctima en una ocasión de las deficiencias en el drenaje del césped y en el curso actual ya sufrió el aplazamiento de dos partidos que debían de disputarse en el campo municipal ribadense. A finales de noviembre se suspendió el enfrentamiento con el Bertamiráns, que se jugaría en el parón navideño, y hace un par de semanas ocurrió lo mismo con la visita del Cerceda. En esa ocasión el juicio del colegiado fue muy discutido por los jugadores, los técnicos y los dirigentes del Ribadeo. «El campo tenía agua, eso es innegable, pero creo que se podría haber jugado», declaró entonces su presidente, Víctor López. «En otras ocasiones estuvo bastante peor. Ante el Rápido de Bouzas y el Arousa, por ejemplo, el campo era un patatal», añadía el mandamás.
El problema «es serio y de difícil solución», asume Víctor López, quien en su afán por reclamar una salida protagonizó una confrontación dialéctica con el alcalde después de la suspensión del partido con el Cerceda, cuya fecha (25 de febrero) la determinó la federación gallega al no haber acuerdo entre los clubes. El regidor, el nacionalista Fernando Suárez, dejó claro que acondicionar el Pepe Barrera «non é unha prioridade nestes momentos», y señaló que la inversión para hacer un drenaje en condiciones rondaría los 350.000 euros.