La herencia que Montserrat quiso compartir con el banco de alimentos

BARREIROS

PEPA LOSADA

Montó un rastrillo en San Miguel, Barreiros, y ya ha comprado 1.250 kilos de patatas

22 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una noticia de La Voz en la que el banco de alimentos de Lugo alertaba sobre las necesidades que atraviesan muchas familias llevó a Montserrat Blanco Guerreiro a embarcarse en otra aventura solidaria. Enfermera de profesión y voluntaria en comedores sociales de Madrid, Montserrat vendió la casa familiar de San Miguel de Reinante (Barreiros) y optó por poner un rastrillo con los muebles, libros, monedas antiguas y otros artículos que heredó de su abuela, María Roibás García y de su tío, Manuel Guerrero Roibás, guardia civil de profesión y también colaborador de causas benéficas. Y todo, con fines benéficos. La recaudación por la venta de estos artículos irá destinada inicialmente al banco de alimentos de Lugo, que atiende en la provincia a unas 9.000 personas; unas 450 o 500 familias solo en A Mariña.

El rastrillo estará abierto hasta finales de mes y la recaudación de estos días ya ha permitido a Montserrat comprar un palé de 1.250 kilos de patatas que irán para el banco de alimentos, entidad con la que seguirá colaborando a medida que vaya vendiendo artículos.

Más de mil libros de temática variada ofrece a turistas y mariñanos. Para los vecinos de San Miguel y también para el Concello de Barreiros y el alcalde van sus palabras de agradecimiento por colaborar en esta acción y arrimar el hombro. Aunque reside en Madrid desde hace dos décadas, Montserrat mantiene un vínculo muy especial con San Miguel, desde donde reconoce que esta iniciativa es solo posible gracias a la herencia de sus antepasados. Quien esté interesado en colaborar puede visitar el rastrillo, ubicado en la carretera general, en horario de mañana.