Martes y miércoles santo, los ladrones también se fueron «de procesión»

José Francisco Alonso Quelle
J. ALONSO RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

j.a

Actuaron pese a las alarmas, la videovigilancia y la ubicación de las tiendas en zonas muy transitadas

20 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El martes y el miércoles santo los ladrones también tuvieron su particular «procesión» por varias tiendas de telefonía. Conforme pasan los días se van conociendo más datos de los hurtos y sorprende la forma en la que actuaron los ladrones, supuestamente de una misma banda. Actuar de madrugada en las zonas más céntricas de las villas, en tiendas que en algún caso contaban con sistemas de videovigilancia y que estaban conectadas a centrales de alarma, o elegir localidades como Foz o Ribadeo que estaban llenas de visitantes no fueron impedimento para ellos. Y se llevaron un cuantioso botín. Solo en la tienda de Vodafone de Ribadeo se hicieron con teléfonos y diverso material que, sumado al dinero que había en caja, superó los 20.000 euros. Todas estas circunstancias están provocando la lógica preocupación en la ciudadanía.

En Ribadeo la tienda está en las Cuatro Calles, en el inicio de la peatonal y en la confluencia de dos arterias de la villa, la Avenida Rosalía de Castro y la calle San Roque. Los carteles, bien visibles, advirtiendo de sistemas de videovigilancia y de la conexión con una central de alarmas no amedrentaron a los ladrones. Se supone que usaron inhibidores de alarma y se limitaron a reventar el bombín de la puerta principal para entrar y llevarse el botín, sin ocasionar grandes desperfectos. Fue el segundo robo que sufrió este establecimiento ribadense en los últimos años.

En la tienda de Movistar de Burela la cámara captó a dos individuos, con capucha y guantes. Actuaron con celeridad, en la madrugada del martes al miércoles. Solo estuvieron dentro un minuto y quince segundos, lo suficiente para comprobar que no había material de valor. Sí ocasionaron desperfectos en tres puertas.

En la madrugada del miércoles al jueves volvieron a actuar, y eligieron dos villas llenas de visitantes, Foz y Ribadeo. A la comarca se supone que llegaron procedentes de Asturias, donde se perpetraron robos similares. También los hubo en Vilalba, con una forma de actuar que se repite, en tiendas de telefonía.