«Nuestra gratitud a la gente; sin su apoyo, la Semana Santa de Viveiro no sería nada»

SALVADOR SERANTES VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

XAIME RAMALLAL

La Xunta de Cofradías también destaca el respaldo institucional a una celebración internacional

27 mar 2017 . Actualizado a las 13:58 h.

A quince días del comienzo de la única celebración de A Mariña declarada de Interés Turístico Internacional, la Semana Santa de Viveiro ya se ha empezado a vivir con Adral, el programa cultural que la precede. Ocho hermandades, más de tres mil cofrades, quince procesiones y miles de horas de trabajo hacen posible un acontecimiento social y económico, con incidencia en A Mariña y Ortegal, que convierte a Viveiro en epicentro de Galicia. Más allá de lo que se ve, de lo que significa esa Semana de la Pasión sabe la Xunta de Cofradías que desde hace veinticinco años la coordina, engrandece y enriquece. Siete de sus miembros ponen el acento cuando desvelan «el secreto, que es el respaldo del pueblo y de los asiduos de Viveiro que se involucran, porque sin el apoyo de la gente, que es lo primordial, la Semana Santa no sería nada, sería inviable. Nuestra gratitud a todos ellos».

En un intento de acercarse a lo que vive la «gran familia» de la Semana Santa de Viveiro, La Voz ha reunido a José Veiga, José Luis Couceiro, René Gómez y Mari Carmen López; respectivamente, presidente, vicepresidente, secretario y portavoz de la Xunta de Cofradías. A esa misma organización pertenecen los otros tres contertulios, Román Escourido, arcipreste de Viveiro; Francisco Fernández, vicepresidente de la Cofradía de Rosario; y María José Penso, ministro de la Tercera Orden Franciscana.

Antes, durante y después, viveirenses de todas las generaciones se implican en la Semana Santa. «Moitos centos; durante todo o ano, quince ou vinte de cada cofradía», explica Veiga. Semanas antes del inicio, «con equipos de voluntarios, prepáranse capuchóns, plánchase, lávase, póñense a punto os fachóns, límpanse as andas...», añade López. Antesala de un Museo, la carpa donde se expone la imaginería, moviliza a «más de ochenta personas, que se presentan para trabajar», cuenta Couceiro. Desde niños a viveirenses de edad avanzada, las quince procesiones salen a la calle con «alguna imagen que tiene más de cien llevadores, y en una procesión sola pasan de mil personas», apostillan Couceiro y Veiga.

La pasión de la Semana Santa de Viveiro va más allá porque, como dice Gómez, «todas as cofradías teñen cofrades de practicamente toda España». López subraya un aspecto diferencial: «Aparte del entorno, del casco histórico, la Semana Santa de Viveiro se siente por la idiosincrasia de los viveirenses, y eso lo transmitimos, porque muchísima gente que viene se implica».

Veiga y López no olvidan la cooperación de los párrocos de la unidad pastoral y tampoco el respaldo institucional: «Desde que entró Melchor -Roel-, el respaldo del Concello ha sido tremendo, pero también coopera la Diputación y, desde que somos de Interés Turístico Internacional, la Xunta se ha volcado con la Semana Santa de Viveiro, tenemos una subvención fuerte».

Al Monumento al Cofrade, que ya han regalado al pueblo, le seguirá una exposición permanente en San Francisco

«Mediante convenios con una empresa grande y dos entidades bancarias, que no quieren que trasciendan sus nombres», la Xunta de Cofradías ha reunido «casi todo» el dinero invertido en el Monumento al Cofrade, ya regalado a todo Viveiro. Se inaugurará el próximo día 8, en los aledaños de la iglesia de San Francisco, en un enclave que se concretará el próximo viernes. Obra del creador Álvaro de la Vega, representa a los Heraldos del Encuentro del Viernes Santo. Todo es gallego en ese conjunto escultórico de bronce, el autor y la fundición. «Es un agradecimiento a todo el pueblo, porque por mucho que trabajemos la Xunta de Cofradías y las cofradías en sí, si los vecinos le dan la espalda a la Semana Santa, no seríamos nadie», subraya José Veiga.

Cuatro años después de haber conseguido que la Semana de la Pasión de Viveiro sea reconocida como de Interés Turístico Internacional, la Xunta de Cofradías que preside José Veiga enriquece el patrimonio colectivo con el Monumento al Cofrade.

¿Será el próximo reto el museo estable que durante la Semana Santa se deja entrever en la carpa Antesala de un Museo? «Xa estamos traballando desde fai tempo», avanza Mari Carmen López. Y Veiga concreta: «En principio, el Concello ya nos ha confirmado que, después de Semana Santa, toda la parte baja de los claustros de San Francisco, los locales ahora ocupados por dependencias municipales, serán para una exposición permanente. Allí se colocarán los pasos del Encuentro y la Última Cena, y alguno más». Ese espacio albergará una exposición permanente de la Semana Santa, lo que la Xunta de Cofradías considera «un paso muy importante».

Cuando los bajos de los claustros estén dedicados a la Semana Santa, en ese espacio «tipo museo», la Xunta de Cofradías «mirará de ter horarios de apertura».

Las imágenes que ya se exponen hasta ahora en San Francisco atraen a turistas, que acuden a la Oficina de Turismo de Viveiro. José Luis Couceiro los guía, porque «ya tienen una ruta; aparcan en la estación de autobuses, cruzan, se meten por la Avenida Cervantes, van a San Francisco y a los claustros y a la iglesia de Santa María, para conocer un poco el pueblo» y su casco histórico.