Localizan en Lugo la furgoneta de la empresa y material en el Golf de los apresados
29 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Pocas horas tardaron en caer dos de los sospechosos del robo cometido en la noche de ayer en un desguace de Barreiros. La Guardia Civil los detuvo en Arévalo (Ávila). Llevaban un Volkswagen Golf que había sido visto estacionado en las cercanías del desguace durante la tarde-noche del domingo y en cuyo interior localizaron parte del material que robaran de la empresa barreirense (catalizadores, tubos de escape de distintas marcas de coche, filtros de partículas, etcétera).
Aparecía también ayer en la zona de O Carqueixo (Lugo) la furgoneta de la empresa que se habían llevado. En este caso estaba vacía; el material que se supone trasladaron en ella había «volado».
Los hechos ocurrieron durante la noche del domingo al lunes. Todo apunta a que los delincuentes conocían el terreno, entraron por la puerta principal, que da a la N-634, extrajeron los bombines de las puertas y recorrieron las cuatro naves, cogiendo en cada una de ellas el material que más les interesó. Tienen la impresión de que conocían perfectamente el lugar, que sabían donde se guardaba todo lo que se llevaron, incluso las llaves de la furgoneta, que estaban metidas dentro de un cajón, en un archivador de un cajón y de las cuales se apoderaron para llevarse el vehículo. Se dejaron alguna herramienta en el suelo (rebarbadoras) que debían de tener preparada para cargar. Suponen que, o no les dio tiempo a llevarse más, o se les olvidó o no tenían más espacio para cargar. La presencia de estos sujetos en Arévalo creen que no es casual y que posiblemente tenían allí contactos para colocar la mercancía.
Se llevan todas las herramientas, obligando a la firma a ir ayer a comprar para poder trabajar
Además de piezas de vehículos los ladrones se llevaron prácticamente todas las herramientas que tenía la empresa para trabajar. Juegos enteros en sus cajas, pistolas de todo tipo, autoclés grandes y pequeños, incluso el de camiones. Ayer por la mañana tuvieron que enviar a un empleado a comprar para poder empezar a trabajar. «Non levaron as máquinas porque estaban atornilladas», señala la afectada, indicando que nada más que en herramientas habría cerca de seis mil euros.