Usuarios de Feve denuncian retrasos, falta de revisores y un reciente incendio en el tren

María Cuadrado Fernández
M. CUADRADO VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

Desde la compañía sostienen que no hubo llamas, solo humo, y que fue el maquinista el que lo sofocó con un extintor

01 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Las quejas por los retrasos, la impuntualidad de los servicios y la falta de revisores en el tren de la costa son una constante en A Mariña y Ortegal. Los usuarios de Feve trasladan sus quejas al personal con el que tratan directamente en el convoy y, en ocasiones, también rellenan hojas de reclamaciones dirigidas a la compañía. A las críticas habituales se suman cada vez con más intensidad las de aquellas personas que denuncian la falta de seguridad que representa la ausencia de revisores. El viveirense José Luis Vázquez es uno de los afectados. Desde hace un año viaja de Viveiro a Ferrol un mínimo de tres veces por semana. «Desde hace más de un mes, los viajes son un verdadero martirio para todos los usuarios», explica. Él mismo fue testigo directo de un incidente, que califica de grave. Ocurrió el pasado lunes, día 29, cuando viajaba en el tren en el tramo entre las estaciones de San Sadurniño y Cerdido, en una zona de monte. Se registró un incendio y, al no haber revisor, tuvieron que ser los pasajeros los que avisaron del incidente al maquinista que, según el viajero, cogió un extintor y apagó el incendio. Tuvieron que esperar a ser remolcados marcha atrás hacia San Sadurniño y allí coger un autobús. Su llegada a Viveiro, prevista para las 21.00 horas, se aplazó hasta las 23.35 horas.

El incidente fue confirmado ayer por fuentes de la compañía ferroviaria, si bien puntualizaron que en ningún momento se registraron llamas, sino solo humo que salía de los bajos del tren. También confirmaron que el maquinista se valió de un extintor para sofocarlo y que los viajeros fueron trasladados por carretera. El viveirense que vivió en primera persona este suceso lamenta que no haya ningún responsable al que dirigirse personalmente para trasladar las quejas: «Pido que nos informen en las estaciones a qué oficinas de Renfe podemos acudir». Solo en agosto ya cumplimentó dos hojas de reclamaciones. El día 22 denunció que, ante la falta de un servicio de tren, el bus que supuestamente puso la compañía no pasó por el apeadero de Viveiro, y el 27, por retenciones importantes durante el viaje. Define la situación de «descontrol».