El BNG presiona a Campos con su salida del gobierno para aguar el pacto con el PP

E. G. S. LUGO / LA VOZ

A MARIÑA

Dice que si se ve obligado a votar en contra será la ejecutiva gallega quien decida

25 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los dos diputados nacionalistas, Antonio Veiga y Xosé Ferreiro, dieron ayer un paso más en la presión que ejercen sobre el presidente de la Diputación para modificar aspectos que, según dicen, para ellos son muy relevantes en el acuerdo firmado para el presupuesto anual por Campos con la portavoz de los populares, Elena Candia. Ayer airearon las discrepancias en comparecencia ante los periodistas para lanzar un mensaje al PSOE más allá de los límites provinciales y con alcance gallego: «En caso de que o Bloque se vexa obrigado a votar contra o documento [presupostario] no pleno do luns, será a executiva nacional do BNG que tome as decisións correspondentes na xuntanza que manterá na tarde do luns». El aviso está lanzado y Campos mantiene abierta la línea de comunicación con Candia intentando pulir lo que firmó antes de mediados del presente mes. «Non estamos dispostos a estar nun goberno que funcione baixo o ditado da oposición», dijeron eiga y Ferreiro.

Si no se produce el acuerdo, los diputados nacionalistas no se plantean un escenario en el que se abstengan en la votación en el pleno del lunes. Ferreiro señaló que en el BNG consideran que, generalmente, la abstención es un voto de cobardes políticos y en su organización no lo son. Es decir, solo cabe el sí o el no; y en este último caso, ya queda reseñada la advertencia lanzada.

Los diputados del BNG indicaron que sabían que el presidente de la Diputación mantenía en su momento conversaciones con el PP, pero no llegaron a conocer el documento hasta que el pasado martes se reunió la junta de portavoces. «Descoñeciamos a existencia dese documento» y, una vez conocido, su contenido resultó para ellos totalmente inaceptable. Veiga sostuvo ayer que gracias a las propuestas del BNG «producíronse melloras no documento pactado entre o presidente da Deputación e a voceira do PP, por exemplo que as grandes partidas de axudas de reparto obxectivo non puidesen ser bloqueadas pola oposición nos anos que abrangue este mandato».

La situación en la mañana de ayer, cuando Veiga y Ferreiro comparecieron ante los periodistas, frente a la fachada de la Diputación, era, según ellos, esta: «Chegamos ao día de hoxe cun documento mellorado pero aínda ten que avanzarse máis para que o Bloque Nacionalista poida aceptalo». Los nacionalistas dejan la puerta abierta y evitan concretar en sus declaraciones. Veiga señaló: «O BNG votará en contra do documento de orzamentos se non se atenden as cuestións relativas ao funcionamento da institución e de reparto igualitario de recursos entre as veciñas e veciños da provincia».

Candia, dispuesta a aplazar hasta final de año el debate sobre el reglamento

Al PP, conseguida la firma por Campos del acuerdo presupuestario alcanzado, solo le queda practicar un ejercicio de generosidad que alivie la presión de los nacionalistas sobre el presidente, pero sin renunciar a la esencia de lo acordado. En esa línea, la portavoz y presidenta provincial del PP, Elena Candia, apunta que podría asumir el compromiso de aplazar el debate del reglamento de la corporación hasta final de año. Candia se mostró conciliadora con el socialista en la comparecencia del pasado jueves ante los periodistas. Dijo: «Nada indica que teñamos que poñer en dúbida a palabra do presidente».

El presidente Campos vive días difíciles. Mientras, todo indica que el que verá salir adelante su aspiración presupuestaria es el alcalde de Becerreá, el diputado no adscrito Manuel Martínez, que, tal como están las cosas, parece que no tendrá inconvenientes para conseguir financiación para la residencia de ancianos que proyecta.