La familia de Luis Ángel de las Heras le ha regalado el anillo para la ordenación
04 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Cuenta atrás para la ordenación como nuevo obispo de Mondoñedo del claretiano Luis Ángel de las Heras Berzal, designado por el Papa para ponerse al frente de la diócesis, que lleva en sede vacante desde hace casi un año. Este lunes llegaba a Mondoñedo y se instalaba en el palacio episcopal, donde pasa estos días previos en retiro, preparándose para la ceremonia solemne del sábado.
Todo está programado al minuto para esa ceremonia y para los actos previos que se desarrollarán ese día. El padre Luis Ángel, que el viernes regresa a Ferrol, partirá de esta ciudad a las 7.30 horas, acompañado por Rodríguez Basanta y Aquilino Bocos, administrador diocesano y misionero claretiano, para encaminarse al Santuario de Nuestra Señora de los Milagros de Saavedra (Begonte), donde rezará ante la Virgen y recibirá una poesía de Manuel María, a quien va dedicado el Día das Letras Galegas. Desde allí, siguiendo un itinerario que forma parte del Camino Norte, Patrimonio Mundial de la Unesco, se dirigirá al Santuario de Os Remedios, copatrona de la diócesis, donde comenzarán a repicar las campanas. El nuncio apostólico, Renzo Fratini, el arzobispo de Santiago, Julián barrio, el párroco del santuario Pedro Díaz y los dos obispos que le precedieron, Gea escolano y Sánchez Monge, entre otros, le darán la bienvenida. Una oración ante la patrona. «Y de allí aunque llueva, iré caminando hasta la catedral, pasando por la sede del Ayuntamiento» señalaba de las Heras. Es preceptiva la recepción oficial de las autoridades municipales. Luego, a la seo, donde será recibido por los miembros del Cabildo y donde orará, antes de retirarse al palacio episcopal para vestirse y acudir a la ceremonia de su ordenación.
La liturgia es precisa e incluye la entrega al obispo que se ordena de los símbolos de su ministerio. El libro de los Evangelios, para enseñar al pueblo; el anillo episcopal, símbolo de su fidelidad a la iglesia, con la que queda desposado y que en este caso fue un obsequio de su familia. La mitra, símbolo de la función del obispo de presidir en la caridad al pueblo de Dios y ser modelo de santidad, que le ha regalado la Conferencia Española de Religiosos (Confer), que ha presidido en los últimos tiempos. Y el báculo, símbolo del pastoreo que deberá ejercer, que es un obsequio de los sacerdotes de la diócesis: «Ha sido realizado en Ferrol, solo pedí que fuera sencillo», explicaba de las Heras. También el pectoral y la casulla que vestirá son regalos, en este caso, de los claretianos de la provincia de Santiago y de los amigos.