La «Río Vero» sustituye a la M-13, que opera en A Mariña y Ortegal desde el 2013
20 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.A punto de cumplirse tres años de la apertura de su base en Viveiro, la Guardia Civil del Mar se moderniza. Ahora se habitúa a la flamante lancha con la que patrullará por A Mariña y Ortegal. Bautizada Río Vero, sustituye a la M-13. Es ligeramente más pequeña, la supera en anchura y está pensada para tres tripulantes, uno menos que la actual.
La M-13 fue diseñada para cuatro hombres y a la Río Vero le bastarían un patrón y dos mecánicos. La nueva patrullera es un poco más rápida, con una velocidad máxima de casi 67 kilómetros por hora, 2 más que la anterior. Mientras a la M-13 se le atribuían 926 kilómetros de autonomía, la flamante lancha puede navegar sin repostar 463 kilómetros, a una velocidad de crucero de casi 41 kilómetros por hora. La nueva patrullera tiene dos motores de 700 caballos cada uno (supera en 40 a la anterior), que accionan dos propulsores hidrojet.
Casco de aluminio y superestructura de fibra también diferencian a la Río Vero de su predecesora, construida en fibra de vidrio. En cuanto a sus dimensiones, la nueva mide 15,65 metros de largo, 85 centímetros menos que la otra. Su diseño facilita el transbordo. Con 72 centímetros de calado (2 más que la anterior), está preparada para navegar en aguas de escasa profundidad. Gana en anchura porque sus 4,48 metros sobrepasan en 60 centímetros a la M-13.
Nada se ha dicho oficialmente de una renovación que no pasa desapercibida para las gentes del mar. La Río Vero es una de las cuatro patrulleras que ha entregado a la Guardia Civil la empresa Auxiliar Naval del Principado, de Astilleros Armón, con sede en el vecino Occidente asturiano.
Una embarcación nueva construida por Astilleros Armón
La flamante patrullera de la Guardia Civil del Mar de Viveiro ha sido construida en Puerto de Vega por Auxiliar Naval del Principado, de Astilleros Armón. Especialistas estiman que la «Río Vero» tiene un valor de mercado de unos 900.000 euros. Es una embarcación insumergible y, además, autoadrizable, lo que significa que si volcase recuperaría su posición inicial. Está dotada con rádar integrado, GPS y plotter, además del sistema mundial de socorro y seguridad marítimos. Patrulleras como la que ahora estrena la Guardia Civil del Mar en Viveiro está diseñadas para vigilancia, protección del medio y, en su caso, para cooperar en salvamento. foto pepa losada