Trabada recibe a la niña guineana que gracias a una campaña benéfica será operada en Oviedo

Con 8 años, Dolores Bocara Roca fue la verdadera protagonista ayer en un acto organizado por el Concello de Trabada, donde esta niña de Guinea Ecuatorial recibió un homenaje muy especial. El caso de Dolores Bocara no entiende de límites. Trascendió fronteras y se dio a conocer en varios continentes. Es un claro ejemplo de que el esfuerzo común ciudadano permitirá a Dolores ser operada de estrabismo en el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, en Oviedo, que finalmente y de forma gratuita asumirá la intervención. Este final feliz no sería posible sin la persistencia y el esfuerzo demostrados por el trabadense Venancio Fernández (Vilafernando, 1953), promotor de la campaña benéfica, trabajador en Guinea Ecuatorial y amigo de la familia de la pequeña.

La alcaldesa de Trabada, Mayra García, ejerció ayer tarde de anfitriona en la recepción de Dolores. Confesó que conoció el caso cuando planificaba la campaña de las elecciones que la convirtieron en regidora. Supo de la campaña benéfica y de concienciación ciudadana de mano de Venancio, quien le puso al tanto de esta nueva acción humanitaria. La regidora calificó la recepción de ayer como un acto de simbolismo y de solidaridad «que representa un grano de arena en medio de un desierto».

Campaña de voluntariado

Entre otras intervenciones, la alcaldesa disertó ampliamente sobre Guinea y la historia del país, e hizo un llamamiento a los vecinos para crear un grupo de voluntariado que colabore con campañas dirigidas a toda la población. También recordó que con Venancio, de forma previa, había planteado la posibilidad de hacer un hermanamiento entre Trabada y la ciudad guineana de Moka. En el acto en la Casa da Cultura, que contó con numeroso público y con colaboradores en la campaña, no faltó un regalo para Dolores. Estaba prevista la actuación musical de las escuelas de Vegadeo y A Pontenova.

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