El bonito del norte fresco escasea más que hace un año y se paga más

s. serantes VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

La lonja de Burela capta la mitad de las ventas y los ingresos de Galicia

31 jul 2015 . Actualizado a las 19:15 h.

Datos provisionales, a la espera de los definitivos de cierre de mes, confirman que el bonito del norte escasea más en lo que va de campaña que en el mismo período del año pasado. Desde junio hasta esta semana, la lonja de Burela ha vuelto a captar la mitad de las descargas y de los ingresos que ha generado ese túnido fresco en Galicia. Menos desembarcos no se están traduciendo en el aumento de precio, ya que los mercados están abastecidos por flotas que operan en puertos vascos y que están pescado más que la gallega. Aun así, el bonito fresco se paga más. La media en Burela alcanza los 4,30 euros el kilo, un 16 % más que los 3,60 del año pasado en junio y julio.

El consumidor final apenas está percibiendo ese incremento de precios en origen. Al menos de momento, en A Mariña se comercializa con cotizaciones muy semejantes a las del año pasado. Depende del tamaño y del tiempo transcurrido desde el día de captura, pero es posible comprar bonito del norte fresco entero a unos 7 euros el kilo.

Burela, como referente, es un ejemplo de una caída de los desembarcos de Thunnus Alalunga que se extiende a toda Galicia. Datos provisionales de pescadegalicia.com, basados en informaciones enviadas por las propias lonjas, confirman que también se ha vendido menos en A Coruña, que este verano vuelve a ser el segundo puerto bonitero gallego. Por volumen y facturación (en torno al 12 % de Galicia), Celeiro es la tercera, y también ahí se ha alijado menos atún blanco. En esta campaña, respecto a la del año pasado, Cedeira, en la comarca coruñesa de Ortegal, ha multiplicado por diez descargas e ingresos de ese túnido.

Pendientes de las cifras definitivas, en junio y julio el bonito del norte fresco ya ha dejado más de seis millones de euros en Galicia, donde se han subastado más de 1,5 millones de kilos. Respecto al año pasado por las mismas fechas, supondría una disminución de cerca de medio millón de kilos y de casi un millón de euros.

Con todo, la campaña bonitera aún está aproximándose a su ecuador. Si se repite lo de años anteriores, todavía quedan agosto y septiembre, sin descartar capturas a principios de octubre.

Las cuentas individuales de varios pesqueros son peores que las del año anterior

ABSA (Armadores de Burela) gestiona la lonja local, líder gallego en bonito del norte fresco y uno de los referentes del Cantábrico y de Europa. Miguel Neira, gerente de ABSA, transmite las opiniones de armadores y tripulaciones sobre lo que va de campaña bonitera: «Moita busca e pouca recompensa». Significa que las embarcaciones consumen combustible y tiempo tratando de localizar a los bancos de bonito, pero que no acaban de conseguir las capturas esperadas. Las economías de los armadores y de los tripulantes se resienten porque toca menos a repartir, no solo porque pesquen menos, sino también porque el gasto es superior.