El día 20 finaliza el descanso retribuido «e non hai para facer nin un tornillo»
16 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Hay mucho escepticismo y una pizca de esperanza en que los políticos sean capaces de parar un proceso que, como contaban los propios trabajadores de Vestas en la larga espera de la tarde del martes a que se dabatieran en el Parlamento gallego sus problemas, la multinacional danesa Vestas «ten moi estudiado». Están convencidos de que va a haber costes, aunque consigan minimizarlos, y sobre todo siembra la incertidumbre sobre el futuro de la fábrica asentada en Chavín desde 1998. «Dous anos e medio como moito vai durar a fábrica porque os chinos van levar todo, con traballo máis barato, polo que a empresa mira o que aforra», explicaba uno de los operarios.
Pero lo más prioritario es el futuro inmediato, y esa fecha, 22 de abril en la que se cierra el período oficial de negociación. Antes tiene que estar todo definido porque el día 20 la plantilla tiene que volver a la fábrica al finalizar la prórroga del permiso retribuido pactado entre el comité y la empresa. «E a partir do luns, ¿qué facemos, se non se pode fabrican nin un tornillo, e quén nos vai pagar, se é que non estamos fora?», lamentaba otro trabajador, mientras contemplaba cómo parlamentarios de los distintos partidos cruzaban la calle que separaba a los trabajadores del Pazo do Hórreo. Hubo quien recordó incluso que el año pasado trabajaron « a toda mecha» para poder tener listos «por lo menos 600 generadores de 2 y 3 MW con destino al país de Obama». El tiempo se acaba.