La propietaria oyó ladrar al perro del vecino pero no le dio importancia
29 ago 2014 . Actualizado a las 07:07 h.Aún a riesgo de ser sorprendidos por los propietarios, que duermen en la planta superior, los ladrones entraron a robar en la madrugada del sábado pasado en un bar restaurante de Cangas.
Accedieron por la parte trasera, que mira hacia el mar, tras forzar la puerta con una pata de cabra o artilugio similar y ya dentro se apoderaron de la máquina expendedora de tabaco y de la caja fuerte, llevándoselas fuera para forzarlas y conseguir lo que había dentro.
Según explicó la dueña, suponen que fue poco antes de las cuatro de la madrugada, que es cuando ella oyó ladrar muy seguido al perro de un vecino. Señalaba que otras veces, cuando ladraba mucho, se levanta a mirar si ocurría algo, pero ese día no le dio importancia y siguió en la cama. El ruido de forzar la puerta no lo oyeron porque, explicó, la zona por donde entraron está orientada al mar y ellos duermen hacia la carretera, justo en la parte contraria de la vivienda.
No sabe a ciencia cierta a cuanto asciende el botín que consiguieron los delincuentes, pero cree que entre el dinero y el tabaco es una cantidad importante, quizás superior a tres mil euros, por decir alguna cifra.
Lo más curioso es que los cacos localizaron la caja fuerte que estaba encastrada en un mueble y oculta a la vista por unos libros y se la llevaron. Apareció abierta después en unos bancos que hay cerca de la iglesia parroquial. Por suerte no había dinero dentro, aunque si algunos documentos importantes.
Con la máquina expendedora de tabaco hicieron lo mismo, la llevaron fuera y la dejaron tirada detrás, en la bajada a la playa. Le quitaron el dinero que había dentro y el tabaco. Era bastante, señalaba la afectada, porque como se acercaba un fin de semana habían repuesto un par de veces, el miércoles y el jueves y además, el tabaco es muy caro, señaló.
En cuanto a los daños, explicó: «A porta destragárona bastante, estaba forzada de meter a pata de cabra e houbo que meterlle bisagras porque lle faltaba un cacho para cerrar», explicó la afectada, que ya ha contactado con una empresa para instalar un sistema de alarmas.
La Guardia Civil realiza ahora investigaciones para intentar localizar al autor o autores de este robo.
Lo único que dejaron en el suelo fue 1,50 euros que seguro que no vieron
Localizaron la caja fuerte que estaba encajada en un mueble, oculta por libros