Colas en Foz para el bautismo en moto náutica
03 ago 2014 . Actualizado a las 22:21 h.¿Quién puede rehusar la tentación de darse un paseíto en moto por la ría de Foz? Mejor dicho en alguna de las 27 motos acuáticas que ayer participaron en el sugerente bautismo náutico que organizó el Concello focense en colaboración con el club Galijet.
Por la mañana ya estaban en la localidad mariñana los participantes, que habían llegado desde diversos puntos de Asturias y Galicia. Venían de Gijón, Avilés, Tapia, Navia, Pontevedra, Ourense, Ferrol, Coruña y otras localidades, entre ellas, Foz, donde los anfitriones, con José Arias incluido, acompañaron a sus visitantes en el recorrido que hizo el grupo hasta Tapia, pasando por As Catedrais, Rinlo y Ribadeo, para que conocieran algunos de los lugares del litoral mariñano más señalados.
Para los que están acostumbrados a navegar dentro de las rías del sur, suponía una novedad atravesar aguas en mar abierto, pero ayer hubo suerte, el Cantábrico estaba calmado y pudieron hacer una singladura tranquila y luego regresar a Foz donde el grupo compartió mesa y mantel, antes de comenzar con el programa de paseos. Arias señalaba que estarían navegando «ata que se acabe a gasolina». Todos deseando que la gente se animara a estrenarse en una actividad tan atractiva. ¡Vaya que se animaron! A las cinco y media ya había cola para subirse a las motos, que zarpaban desde Tupide, para darse una vuelta por la ría. El viaje era gratuito, la única condición que se exigía para subir a bordo de las máquinas náuticas era haber cumplido los seis años de edad. Y todos, veteranos y novatos, disfrutaron de la sensación incomparable de cabalgar sobre el agua, sintiendo el viento y el salitre golpeando la cara. Un auténtico lujo y una aventura.