La burocracia retrasa la demolición del faro de Burela, de 1959

A MARIÑA

11 may 2014 . Actualizado a las 07:03 h.

Previstas para finales del mes de abril, la burocracia retrasa las obras de la retirada de los restos del faro Pena Burela, construcción de 1959 dañada por los temporales de este invierno; el golpe de muerte lo recibió del Cristina. Esta singular actuación exige permisos especiales que demoran la tramitación de una obra adjudicada por la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao por un importe que ronda los 56.000 euros.

Marcor Xove S.L., empresa mariñana especializada en trabajos marítimos y actuaciones submarinas especiales, será la encargada de acometer esta obra. Fuentes de la firma confían en poder iniciar los trabajos a finales de la próxima semana o a comienzos de la siguiente. Calculan que los trabajos se prolongarán durante unos quince días, aunque son conscientes de que las condiciones del mar también influirán en el desarrollo de la actividad. El plan de trabajo implica estabilizar la pieza y realizar cuatro cortes en el faro. Los restos caerán al fondo del mar, de donde serán recuperados y transportados en una gabarra a zona portuaria antes de ser trasladados a un gestor de residuos autorizado. Desde el Concello y también desde el IES Monte Castelo manifestaron su intención de conservar parte de los restos para exhibirlos. Un equipo formado por cuatro o cinco especialistas se ocuparán de acometer la demolición. Esta firma, que presta sus servicios de Baiona (Pontevedra) a Bayonne (Francia), también se encargó de la demolición del faro de Sanxenxo, aunque la obra de Burela requiere unos trámites distintos. De forma provisional y mientras no se construye el nuevo faro, se instalará en Pena Burela una baliza metálica de cinco metros de alto.