Cortarán el faro de Burela que partió el temporal, y un trozo adornará el acceso al puerto

SALVADOR SERANTES BURELA / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

La retirada y la sustitución siguen en marcha, y sin plazos

29 mar 2014 . Actualizado a las 11:44 h.

Partido en su base, desplazado e inutilizado. Así quedó el faro de Burela tras el tren de temporales del invierno. La Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao ha optado por cortar el tronco de hormigón in situ. Dependerá del coste, pero piensan enuisarlo para reforzar la escollera y un trozo, como adorno en el nuevo acceso al puerto, por el que Burela espera desde hace años.

La cadena de ciclogénesis explosivas rompió una estructura de hormigón construida con más ganas que medios en 1959. Partido e inclinado, del faro de Pena Burela queda un tronco de más de tres metros de diámetro y unos seis de alto. Estimaciones técnicas apuntan que puede pesar unas 150 toneladas. Inservible, se pensó en demolerlo con explosivos o en seccionarlo. Una empresa especializada tratará de cortarlo con un filo de diamante, explicó el alcalde burelense González Barcia.

Aún no hay plazos para trocearlo y retirarlo. El primer edil de Burela recalcó que la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao «é unha administración pública, e debe cumprir trámites». González Barcia no duda de que esa obra se hará, ni tampoco de Ana Pastor, la ministra de Fomento, cumplirá su compromiso de hacer otro faro, «o máis exacto posible» al destruido, para reponerlo. Entre otras razones, porque el faro es un símbolo del escudo de Burela.