Detenido un rumano acusado de captar gente en su país para utilizarla para mendigar

i. e. la voz / viveiro

A MARIÑA

28 ene 2012 . Actualizado a las 07:05 h.

Detenido como supuesto autor de un delito de trata de seres humanos. Es el cargo que, a groso modo, le achacan los funcionarios de la Comisaría de Policía de Viveiro al súbdito rumano que apresaron en Burela el pasado día 25.

Sospechan que es el cabecilla de una red que se dedica al ejercicio de la mendicidad en varias localidades de A Mariña. Su papel consistiría en captar a personas en su país para traerlas a la comarca; el individuo se encargaría de sufragarles los gastos del viaje y, ya una vez aquí, les retenía la documentación y, bajo amenazas, les obligaba a ejercer la mendicidad.

Según la información facilitada por la policía, eso es lo que sospechan que ocurrió con una menor a la que no solo obligaron a pedir y a entregar el dinero que recaudaba, sino que también llegaron a agredirla físicamente.

La operación para desarticular esta red comenzó el verano pasado, cuando agentes destinados a Viveiro detectaron un incremento inusual de personas procedentes de Rumanía que se dedicaban a ejercer la mendicidad en la zona de A Mariña. En relación a estos hechos ya detuvieron en diciembre pasado a cinco personas, que fueron acusadas de estancia ilegal en España, lesiones y hurto. En aquella primera operación cayó una mujer de nacionalidad rumana a la que imputaron también como presunta autora de un delito de trata de seres humanos. Esta mujer era, supuestamente, la encargada de repartir con una furgoneta al personal que ejercía como mendigo, por las distintas localidades de A Mariña, eligiendo como ubicación, en la mayor parte de las veces, las entradas a supermercados, o al hospital, por donde transita un gran número de personas.

Y fue también durante esa primera fase de detenciones cuando localizaron a una menor de edad, que luego fue derivada a un centro de acogida de menores mientras las autoridades preparaban toda la documentación para devolverla a su país y entregarla a su familia. Al parecer, esta joven llevaba consigo una libretita donde iba anotando las cantidades que recaudaba cada día mendigando, dinero que se quedarían los cabecillas de la red.

El detenido esta semana, había regresado a su país cuando apresaron en la ocasión anterior a su mujer, la supuesta encargada de la distribución y cobro. Se conoce que fue al volver de nuevo a la comarca mariñana cuando la policía lo detuvo.

En todo caso, este hombre quedó en libertad con cargos tras declarar en el Juzgado.