La crisis griega da más opciones a De Guindos para presidir el Eurogrupo

a. L. bruselas / colpisa

ECONOMÍA

ANDREA COMAS | REUTERS

Rajoy sabe que es su única bala para culminar con éxito la operación retorno a la cúpula económica comunitaria, una de sus grandes obsesiones europeas desde que llegó a La Moncloa

08 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La presidencia del Eurogrupo, el consejo de ministros de Finanzas de la moneda única, se decidirá en cuestión de meses y el presidente español, Mariano Rajoy, sabe que es su única bala para culminar con éxito la operación retorno a la cúpula económica comunitaria, una de sus grandes obsesiones europeas desde que llegó a La Moncloa hace tres años. Luis de Guindos, su ministro de Economía, es el elegido para desempeñar un cargo que desde hace dos ejercicios ocupa Jeroen Dijsselbloem, que venderá su piel muy cara, pues quiere repetir.

Sin embargo, la gestión de la crisis griega puede acabar con las aspiraciones del holandés, como apuntan fuentes comunitarias. De momento, y para alegría de Luis de Guindos, Dijsselbloem no ha empezado con buen pie. Para muestra, la rueda de prensa que protagonizó hace una semana en Atenas junto a su homólogo griego, Yanis Varoufakis. Gestos, susurros, una tensión enorme... Todo pareció saltar por los aires provocando una crisis diplomática de gran magnitud en un asunto tan sensible para el futuro de la UE.

La cruz de Alemania

La prensa alemana, como el Süddeutsche Zeitung, ya le ha puesto una cruz y sostiene que tiene «cero posibilidades» de repetir. Un sentir compartido en Bruselas. «Está quemado», enfatiza un funcionario comunitario. Son varios los factores que Dijsselbloem tiene en contra. Por ejemplo, su gestión del rescate de Chipre, su primer gran caballo de batalla que provocó enormes críticas después de haber puesto en riesgo el blindaje de los depósitos inferiores a 100.000 euros. Se suma el flamante nuevo presidente de la Comisión y expresidente del Eurogrupo es un enemigo declarado del holandés, más desde que Dijsselbloem dijo en televisión que su antecesor es un «bebedor y fumador de fondo». Y ahora, la tragedia griega.

Toda una serie de factores que no hacen sino fortalecer la candidatura de Luis de Guindos, «un ministro muy respetado entre sus colegas», como afirma un veterano dirigente socialista europeo. España parece tener el apoyo de Francia, Italia y, sobre todo, de Alemania, como ya manifestó públicamente Angela Merkel.