La entrada de Manos Limpias en el caso Urdangarin complica el futuro de la hija del rey

La Voz

FIRMAS

08 feb 2012 . Actualizado a las 14:48 h.

El juez del caso Babel, José Castro, admitió que el sindicato ultraderechista Manos Limpias (que ya logró, sin el apoyo de la Fiscalía, sentar en el banquillo a Garzón en el proceso del franquismo) se convierta en acusación popular en el sumario del caso Nóos. Su entrada complica, y mucho, el futuro de la infanta Cristina. El secretario general del colectivo, Miguel Bernard, informó ayer de que en cuanto Urdangarin declare como imputado el 25 de febrero, pedirá la declaración, al menos como testigo, de la hija del rey. El sindicato considera que Cristina de Borbón tiene una triple responsabilidad, en cuanto se lucró personalmente de los negocios de su marido, era miembro de la ejecutiva de Nóos y es copropietaria de Aizoon.