Miedo a los vecinos de Fukushima

kimiko de freytas-tamura KITAKAMI / AFP

INTERNACIONAL

En los centros de acogida los discriminan por si contagian radiactividad

14 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Los habitantes que huyeron de los alrededores de la nuclear de Fukushima, gravemente dañada por el seísmo y el tsunami del 11 de marzo pasado, son rechazados en los centros de evacuación por temor a que sean radiactivos y contaminen a otros.

Esos habitantes, que tuvieron que abandonar sus domicilios, granjas y ganado por el accidente en la central, necesitan un certificado oficial de la prefectura para demostrar que no están contaminados y poder entrar en los centros de acogida.

Los detectores instalados en la entrada de los edificios se han convertido en puestos de control que dan acceso a un lugar para dormir o incluso a atención médica, pese a que los expertos afirman que los evacuados de Fukushima no representan ningún peligro para los demás.

«A menos que se trate de empleados de la central, la gente ordinaria no es peligrosa», asegura Kosuke Yamagishi, del departamento médico de la prefectura de Fukushima.

«Sencillamente, la gente está muy inquieta, lo que por desgracia puede provocar discriminación», declaró.

Rechazada en un hospital

Según el diario Mainichi, una niña de ocho años oriunda de Minamisoma, a 20 kilómetros de la central, fue rechazada en un hospital de Fukushima por no tener el certificado de no radiactividad.

Los responsables de los centros de evacuación, por su lado, insisten en sus exigencias.

Según uno de ellos, todos los residentes en un radio de 30 kilómetros alrededor de la central nuclear «deben presentar el certificado». «Si no lo tienen, deben someterse a detección». «Es para que los demás evacuados se sientan seguros», añade el responsable.

El episodio recuerda la discriminación que sufrieron los supervivientes de las bombas atómicas lanzadas por Estados Unidos en Hiroshima y Nagasaki en 1945, conocidos como los hibakusha.

Kenji Sasahara, director de un centro de detección en Minamisoma, declaró que muchos evacuados están indignados de tener que presentar un certificado. «De más de 17.000 personas analizadas, ninguna presentaba ningún riesgo, salvo tres operarios de la central», precisa.