Bruselas propone elevar sus salarios un 3,7% a pesar de que prevé que la inflación de la UE no pasará del 0,1% en el 2009
27 nov 2009 . Actualizado a las 20:25 h.La Comisión Europea ha propuesto a los Veintisiete subir en un 3,7% el salario de sus casi 36.000 funcionarios, de los que alrededor de 5.000 son españoles, según confirmó ayer en Bruselas la portavoz de Asuntos Administrativos del Ejecutivo Comunitario, Valerie Rampie.
Ese incremento, que se hará efectivo para el 2010 y que deberá ser debatido y aprobado por el Consejo de Ministros de la Unión el mes que viene, supera con creces la inflación prevista para este año por la Dirección de Asuntos Económicos y Financieros de la propia Comisión. Tanto en el conjunto de la UE (0,1%), como en la eurozona (0,3%) y en Bélgica (0%), en cuya capital residen la mayoría de los eurofuncionarios.
Grados
Los sueldos de los trabajadores públicos de la Comisión oscilan en la actualidad entre los 2.630,96 euros mensuales del personal recién incorporado en el grado D5, y los 16.094,79 de los empleados de más veteranía del grado A16. A partir de ahora, si la propuesta de la Comisión sale adelante, los trabajadores de esas categorías pasarían a percibir 1.168 euros y 7.146 euros más al año, respectivamente. Para un salario medio de 5.000 euros mensuales, la subida anual rondaría los 2.220 euros, es decir unos 185 euros cada mes.
La portavoz del Ejecutivo comunitario rechazó ayer valorar el hecho de que el incremento se proponga precisamente en una época de crisis que ha dejado a millones de europeos en el paro y que ha forzado a muchas empresas a congelar o rebajar los salarios de sus trabajadores, mientras la Comisión recomienda moderación en el gasto público del que se nutren las nóminas de los funcionarios nacionales.
«Justo y objetivo»
Al contrario, Rampie aseguró que el incremento de los eurosalarios es «justo y objetivo», recordó que se rige por una norma legal (el Estatuto de la Función Pública de la UE), y explicó que el cálculo del 3,7% se ha basado en el análisis comparativo de las subidas salariales que recibieron el año pasado los trabajadores públicos de varios países, entre ellos Bélgica (4,4%), España (4,3%) y Alemania (3,1)%. «Nosotros no decidimos nunca de manera discrecional, caprichosa, en función de nuestro humor, si subir o bajar los sueldos. Lo que lo determina son los salarios de los funcionarios nacionales», dijo Rampie, que apuntó, además, que Bruselas es una de las ciudades más caras de Europa.