Al menos nueve muertos por la explosión de dos bombas en hoteles de Yakarta

AFP

INTERNACIONAL

Entre los heridos hay ciudadanos de diferentes nacionalidades, pero por el momento se descarta la posibilidad de españoles.

17 jul 2009 . Actualizado a las 15:41 h.

Al menos nueve personas han muerto -una de ellas neozelandesa- y más de medio centenar han resultado heridas en los dos atentados con bomba simultáneos perpetrados contra sendos hoteles de lujo del centro financiero de Yakarta, la capital de Indonesia.

Una tercera bomba, lista para detonar, fue hallada y desactivada por la policía indonesia en una habitación de la décimo octava planta del JW Marriot, uno de los hoteles atacados, informó el jefe de Policía de Yakarta, general Wahyono.

La Policía indonesia ha confirmado que el neozelandés muerto fue identificado como Timothi Mackay, de 62 años y presidente de la compañía de cementos PT Holcin.

Entre el medio centenar de heridos hay ciudadanos de una decena de nacionalidades -entre ellas de Estados Unidos, Corea del Sur, Canadá y China-, según los datos de la Policía y los tres hospitales donde han sido ingresados.

Por el momento, las embajadas de España y de los países de América Latina no han recibido información de que alguno de sus ciudadanos se haya visto afectado.

Explosiones sincronizadas

La primera deflagración se produjo a las 07.45 de la mañana (00.45 GMT), en el concurrido restaurante Syalendra de la planta baja del hotel Ritz-Carlton y acabó casi al instante con la vida de seis personas, informó la policía.

La segunda, tan sólo un par de minutos después, ocurrió en el restaurante Airlangga del JW Marriott, situado en la tercera planta, a escasos 20 metros del otro hotel, y reventó casi todos los grandes ventanales, destrozó el mobiliario de la entreplanta, y causó dos fallecidos más.

La novena víctima murió de camino al hospital, según fuentes sanitarias, a causa de las graves heridas.

Además, han sido descubiertos dos cadáveres mutilados y sin cabeza entre los escombros, por lo que la Policía no descarta que los atentados hubieran sido cometidos por terroristas suicidas, indicaron varios canales locales de televisión.

En los instantes posteriores al doble atentado se vivieron momentos de caos y angustia, entre los escombros dejados por las explosiones, las carreras de los heridos ensangrentados saliendo a la calle y la nube de humo blanco que envolvió la zona.

«Había heridos por todas partes, mucho humo y un fuerte olor a azufre y pólvora. Me quedé blanco cuando descubrí trozos de carne humana esparcidos por el suelo», relató a Efe uno de los primeros médicos en llegar al lugar y que prefirió mantener su anonimato.

Los heridos más graves fueron trasladados rápidamente por los taxis que aguardaban junto a los hoteles, antes de la llegada de las primeras ambulancias, camiones de bomberos, y agentes de la policía y efectivos del Ejército.

El presidente de la comisión de seguridad del Parlamento indonesio, Theo Sumbuaga, indicó que las primeras pesquisas policiales apuntan hacia que el doble atentado podría ser obra de suicidas, que habrían pernoctado en estos establecimientos de cadenas hoteleras internacionales.

El recién reelegido presidente del país, Susilo Bambang Yudhoyono, confirmó que las acciones fueron perpetradas por «un grupo terrorista», pero evitó responsabilizar a la Yemaa Islamiya (YI), el brazo del Al Qaeda en el Sudeste Asiático, y al que se le han atribuido todos los atentados en Indonesia de los últimos años.

Varios analistas destacaron la terna de criterios que han guiado a los terroristas en este doble atentado: «objetivo sencillo», «perfil alto» e «impacto alto». Las bombas no ocasionaron grandes daños en ninguno de los dos hoteles, pues según la Policía los autores de los atentados emplearon escasa cantidad de un material «muy explosivo».

Seguridad precaria

De esta forma, se ha puesto fin a casi cuatro años sin atentados terroristas de cariz islamista en Indonesia, el país con un mayor número de musulmanes del mundo, más de 200 millones de fieles, en su mayoría de carácter moderado.

La acción más sangrienta de los radicales tuvo lugar en la turística isla de Bali en 2002, cuando una cadena de bombas en locales nocturnos mató a 202 personas.

El propio hotel JW Marriott fue objeto de otro atentado en agosto de 2003, que provocó trece muertos y un centenar de heridos.

Este hecho ha puesto en entredicho la efectividad de los controles de seguridad de que disponen desde entonces éste y todos los grandes establecimientos hosteleros de Yakarta.

El doble atentado de hoy se produjo diez días después de que Yudhoyono revalidase su cargo con comodidad en unas elecciones presidenciales ampliamente pacíficas en las que el presidente esgrimió su contundencia contra el terrorismo.

En su primera legislatura fueron detenidos varios centenares de islamistas, y fueron condenados y ejecutados los tres terroristas involucrados en los atentados de Bali de 2002.