Uno de los artífices de la bonanza en la era Clinton

La Voz

INTERNACIONAL

24 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Larry Summers es un prestigioso economista a quien se considera como uno de los artífices de la bonanza económica en la era Clinton. Tras su paso por el Tesoro (1999-2001), ocupó el puesto de presidente de la Universidad de Harvard (2001-2006). Precisamente un hecho que protagonizó en este último cargo y que le costó la dimisión es lo que le hace más conocido fuera de los círculos de expertos en economía.

Summers afirmó en una conferencia que «las mujeres tienen una capacidad innata menor que los hombres para las matemáticas». Esta afirmación, científicamente errónea y que recogieron medios de comunicación de todo el mundo, lo hizo blanco de miles de críticas.

En su actividad como experto en economía, por el contrario, sí parece haber tenido éxitos. Nacido en New Haven, en el estado de Connecticut en 1954, es sobrino de dos grandes economistas ganadores del premio Nobel: Paul Sammuelson y Kenneth Arrow. Empezó estudiando Física en el Instituto Tecnológico de Massachusetts pero pronto se decantó por la Economía. A los 28 años se convirtió en el profesor más joven en la historia de Harvard.

Desde principios de los años ochenta, Summers ha participado en la política económica de Estados Unidos de alguna forma, primero como asesor en los consejos de los presidentes, por ejemplo con Ronald Reagan y, más tarde, ya con Clinton con el cargo de secretario del Tesoro. En la actualidad sigue siendo profesor de la Universidad de Harvard.