El Baradei esgrime las lecciones de Irak como prevención frente a un posible ataque a Irán

Efe

INTERNACIONAL

El director general del OIEA recuerda la muerte de cientos de miles de civiles.

17 sep 2007 . Actualizado a las 23:29 h.

El director general del OIEA, Mohamed El Baradei, pidió hoy tener presentes las lecciones de la invasión de Irak y la muerte de cientos de miles de civiles al advertir de un hipotético ataque militar contra Irán.

«He estado preocupado por lo mucho que he escuchado sobre el uso de la fuerza. Creo que es contraproducente», dijo El Baradei ante los periodistas durante la Conferencia General del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que se celebra en Viena. «Espero que todo el mundo haya aprendido la lección tras la situación de Irak. Un drama diario. Y tenemos a 700.000 civiles que han perdido sus vidas por el resultado de las sospechas de que el país tenía armas nucleares. Tenemos que ser muy prudentes cuando hablamos del uso de la fuerza», remarcó El Baradei.

El ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, señaló ayer que Francia tiene que estar preparada «para lo peor, que es la guerra» con Irán, aunque matizó que no es algo que vaya a suceder por el momento. En alusión a las palabras de Kouchner, El Baradei dijo que no quería entrar en una discusión sobre el uso de la fuerza, pero pidió «mantener la calma y no exagerar el asunto iraní», al subrayar que no hay bases argumentales para hablar de un ataque a Irán.

«No hemos visto instalaciones no declaradas funcionando en Irán. No tenemos ninguna prueba de que el programa nuclear iraní esté siendo utilizado para armas», explicó El Baradei. Además, reiteró que Irán no representa un peligro claro e inminente «como para ir más allá de la diplomacia», antes de insistir en que «el uso de la fuerza es el último recurso, cuando todos los demás han sido agotados».

«Espero que todos trabajemos para continuar cumpliendo la Carta (de las Naciones Unidas) que limita el uso de la fuerza a casos extremos de ataques o amenazas inminentes», añadió.

El Baradei reclamó en 2003, antes del comienzo de la guerra en Irak, más tiempo para inspecciones ante la impaciencia de EEUU por invadir el país y derrocar a Sadam Husein con el argumento de que tenía armas de destrucción masiva, que después nunca se hallaron.

Paralelamente, el vicepresidente de Irán y director de la Organización de la Energía Atómica de ese país, Gholam Reza Aghazadeh, criticó hoy en Viena lo que calificó como el «doble rasero» de Occidente y el camino de la confrontación emprendido por algunos Estados, a los que no citó.

En su alocución ante las 144 delegaciones de los Estados presentes en la Conferencia General del OIEA, Aghazadeh recordó que el programa nuclear de Irán comenzó a desarrollarse durante el régimen de Mohamad Reza Pahlevi, el último Sha, con la ayuda de EEUU y de otros países occidentales.

Sin embargo, se paralizó tras la Revolución Islámica, lo que achacó a «la política discriminatoria y al doble estándar en el área de la energía nuclear por parte de algunos países occidentales».

«Me gustaría transmitirles a algunos países occidentales que siempre han elegido el camino de la confrontación, en lugar del entendimiento», lo que a juicio del vicepresidente iraní se debe a que «no pueden soportar que Estados independientes y países en desarrollo» logren dominar la tecnología nuclear.

El representante iraní no hizo mención explícita a las dos tandas de sanciones impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU debido a que Irán no congela sus trabajos de enriquecimiento de uranio, y aseguró que la tecnología nuclear es un «derecho inalienable» de la República Islámica.

El foro tiene lugar tras la reunión de la Junta de Gobernadores celebrada la semana pasada, en la que varios países occidentales se mostraron críticos con El Baradei, por un reciente acuerdo entre Irán y el OIEA.

El convenio del pasado 21 de agosto establece que la República Islámica cooperará con el OIEA para tratar de esclarecer hasta fin de año cuestiones aún abiertas de su programa nuclear, que ocultó en parte a la comunidad internacional durante 18 años, hasta 2003.

EEUU, Alemania, Francia y Reino Unido expresaron su temor a que ese acuerdo pueda servir para que Irán gane tiempo mientras desarrolla su programa nuclear y han repetido sus sospechas de que el fin último de la República Islámica es lograr la bomba atómica.

Precisamente, Estados Unidos ha convocado el próximo viernes en Washington una reunión con los otros cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad (Rusia, China, Francia y R.Unido) y Alemania para analizar la posible imposición de una tercera tanda de sanciones a Irán.

El portavoz del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Mohamed Ali Hoseini, adelantó que revisarán su colaboración con el OIEA, si el Consejo aprueba una nueva resolución contra el país.