Buteflika mantiene su estrategia de paz pese a los atentados suicidas

EFE

ESPAÑA

La cifra de muertos ha aumentado a 22 personas en el último recuento.

08 sep 2007 . Actualizado a las 13:13 h.

El presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, mantendrá su línea de paz y reconciliación pese a los atentados suicidas perpetrados por la banda Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), según insistieron hoy medios gubernamentales.

El propio Buteflika reiteró anoche, tras el atentado ocurrido en Batna, en el que murieron 22 personas y otras 107 resultaron heridas, que no se desviará de su oferta de paz hacia aquellos extremistas que decidan deponer las armas.

«Quiero decir al pueblo argelino y al extranjero que hemos optado por la vía de la reconciliación nacional y la concordia civil como vía estratégica de la que no nos apartaremos jamás», proclamó Buteflika anoche ante las cámaras de la televisión.

Cinco son ya los atentados suicidas que la banda ha cometido en Argelia desde el 11 de abril pasado, cuando tres kamikazes estrellaron los vehículos que conducían contra la sede del Gobierno y dos dependencias policiales, en los que murieron 30 personas e hirieron a cerca de trescientas.

El 11 de julio se produjo un atentado similar contra un cuartel de la localidad de Lakhadaria en el que murieron 10 militares y otra docena quedaron heridos.

Hasta ahora el fanatismo religioso difundido en las mezquitas y en los barrios más pobres se caracterizaba por su propaganda en favor de la «yihad» o guerra santa, pero no solicitaba el sacrificio físico de sus partidarios.

La situación se modificó radicalmente cuando la banda salafista anunció en septiembre del año pasado que se había afiliado a la organización del terrorista de origen saudí Osama Bin Laden, a la que declaraba subordinarse.

Esta decisión no habría sido aceptada por todos los cabecillas regionales de la banda, según las declaraciones hechas por varios de los que se rindieron recientemente para acogerse a las medidas de amnistía ofrecidas por el Gobierno.

Se da por seguro que la autoridad del emir o cabecilla nacional de AQMI, Abdelmalek Drukdel, es impugnada por otros terroristas, en particular el llamado Mokhtar Belmokhtar que opera en los confines saharianos.

Belmokhtar juega un papel importante en la organización ya que tiene el encargo de recolectar los fondos obtenidos por el contrabando y la compra de armas y explosivos que penetran en Argelia por las fronteras de Niger y Mali, y posiblemente la de Libia.

El grupo terrorista también ha innovado en su propaganda al difundir vídeos por Internet en los que se muestra la preparación de los atentados y se difunden declaraciones incendiarias de los suicidas.

Drukdel ha sido aleccionado por Ayman El Zawari, numero dos de la organización de Bin Laden, para montar en Argelia, a escala reducida, una estrategia similar a la que mantiene en Iraq Al Qaeda en Mesopotamia.

«Estamos ante una copia de la manera de operar de Al Qaeda en Irak y Afganistán, lo que en el Magreb hasta ahora parecía limitarse a Marruecos», dijo a Efe un experto en seguridad de una embajada europea en la capital argelina.

Por primera vez, el atentado cometido en Batna por un terrorista suicida, que todavía no ha sido identificado, estaba dirigido contra el cortejo del propio Buteflika, que terminaba en esa ciudad una gira por varias provincias.

Buteflika dice haber reflexionado ampliamente sobre el terrorismo que golpea a su país y llegado a la conclusión de que no existe otra solución que la concordia civil, la amnistía y la reinserción social de los fanáticos.

El mandatario se dice obsesionado por recuperar el tiempo perdido en los diez años de guerra civil iniciada a principios de 1992, con un impresionante resultado de más de 150.000 víctimas mortales.

El Ejército argelino ha cosechado éxitos en la lucha contra el terrorismo. El más importante de ellos se produjo el 26 de abril pasado al dar muerte el «numero dos» de AQMI, Samir Saioud, en un enfrentamiento ocurrido en la provincia de Bumerdés.

La institución militar también ha sufrido los embates terroristas y el 8 de abril pasado, tres días antes de los atentados suicidas de Argel, la banda tendió una emboscada a una caravana en la región de Ain-Defla, en el que perdieron la vida nueve militares.

La banda terrorista afirmó entonces que ese atentado era «un modesto presente a nuestros hermanos musulmanes de Chechenia». EFE