Denuncian a la guardería que entregó a una niña con cinco mordiscos

La Voz LUGO/LA VOZ.

LUGO

La pequeña salió del centro llorando desconsoladamente y con la nariz roja e hinchada

27 oct 2010 . Actualizado a las 14:25 h.

Los padres de una niña de dos años a la que recogieron en una guardería privada de A Milagrosa con diferentes lesiones en la cara, posiblemente producidas por mordeduras, presentaron ayer denuncia en comisaría. La pequeña salió del centro llorando y con la nariz enrojecida e hinchada cuando su madre fue a recogerla.

Inicialmente, la madre no se percató del estado de la niña porque el llanto le desfiguraba la cara. Lo más evidente en ese momento era la nariz. La persona de la guardería que se la entregó, según el testimonio de la familia, le dijo cuando se la llevó en esas condiciones que había sido «en un momentito». Parece ser que también le comentaron que la pequeña estaba detrás de una puerta y que no la vieron. Cuando la niña se serenó y dejó de llorar observaron en su rostro varias señales, similares a las de mordeduras, al igual que en una oreja. En total contaron cinco.

La familia presentó denuncia en comisaría, según aseguraron, para evitar que a otro niño le pueda ocurrir lo mismo que a su pequeña. Rechazaron en todo momento que su intención fuera la de conseguir una indemnización por las lesiones que presentaba la pequeña.

Familiares de la niña están convencidos de que ésta estuvo desatendida y sin vigilancia de un adulto durante largo rato. Se basan en la cantidad de los mordiscos que recibió. Aseguran que tiene señales de dientes de pequeño tamaño por lo que sospechan que otro niño pudo haberle causado las lesiones.

La pequeña, a las preguntas que le formularon sus familiares sobre el origen de las lesiones que presentaba, respondió que había sido un niño, según señalaron.

Los padres, al ver el estado en el que regresó la niña de la guardería, decidieron acudir con ella a urgencias de pediatría, donde les facilitaron un parte con las lesiones que comprobaron. Seguidamente se trasladaron a comisaría para presentar una denuncia contra la guardería.

La guardería

La propietaria de la guardería reconoció que era conocedora de la denuncia presentada por los padres contra su establecimiento. Apuntó que el accidente fue inevitable. Según su versión, había cinco niños jugando detrás de una puerta. Las cuidadoras acudieron cuando oyeron llorar a uno de ellos y se encontraron a la niña en esas circunstancias. Le colocaron hielo sobre las lesiones y le echaron una pomada antiinflamatoria. Según la propietaria, las dos cuidadoras del centro están destrozadas y sienten impotencia ante lo ocurrido.