El presidente dice que la única obra que está ejecutada es la promovida por la Diputación Considera probado que el Concello de Lugo aplazó la firma intencionadamente por causas políticas
22 jul 2005 . Actualizado a las 07:00 h.«En este momento el convenio para ejecutar el Plan Paradai está perdido», aseguró el presidente de la Diputación, Francisco Cacharro Pardo, que consideró al alcalde, José López Orozco, único responsable de la situación. El representante de la institución provincial rechaza que el citado acuerdo se pueda calificar de culebrón y que sea necesario un encuentro entre técnicos o políticos de ambas instituciones lucenses. Matiza que, independientemente de lo que pueda afirmar cada uno, lo constatable es que las únicas obras del plan que están ejecutadas son el nuevo puente Romai con las vías de enlace, trabajos financiados por la Xunta pero para los que había adelantado el dinero la Diputación. Para Cacharro Pardo, «ahora se ve que la decisión del Ayuntamiento de no entregar los terrenos fue intencionada para evitar que se ejecutase el plan». Sin embargo, considera un error dejarlo pendiente por motivos políticos, pudiendo firmarlo ya ahora. A la afirmación del concejal de Urbanismo, José Ramón Gómez Besteiro, de que estuviese tranquilo, que el convenio se firmará, el presidente de la Diputación replicó que el que se tiene que tranquilizar es el alcalde, que también es el máximo responsable de que la ciudad avance o no. Francisco Cacharro argumenta que si el Concello hubiese firmado ahora el convenio, con el nuevo Gobierno autonómico lo podría ampliar o modificar, pero siempre sería una ventaja no partir de cero. «Incluso teniendo en cuenta que la próxima Xunta va a ser amiga, al Ayuntamiento de Lugo le interesaba llegar con algo firmado para poder decirles en Santiago que la Xunta del PP, que era tan mala, había ratificado el convenio, o sea que ellos tendrían que hacer lo que falta», dijo. Para Cacharro resulta descabellado y de juego de niños afirmar que la Diputación había ejecutado la parte del plan que la beneficia sólo a ella. Considera que esa parte de la ciudad tiene un carácter suburbial y que los principales beneficiados por la obra realizada son los habitantes de la zona de As Gándaras y de las viviendas sociales. La última posibilidad sería que la Xunta celebre otro consello, como parece estar previsto, y que le de el visto bueno al plan. Para el presidente de la institución provincial, los más de nueve millones de euros previstos justifican un último esfuerzo para que quede ratificado el acuerdo. Con respecto a la parte del plan que queda fuera del convenio entre Xunta y Diputación, el responsable de esta última señaló que la explicación puede ser que la Consellería lo excluyó porque aún no están disponibles los terrenos que Renfe dedica al tráfico de mercancías, frente a la Rúa Alta. Coordinar las diputaciones Por otra parte, sobre el anuncio de una ley de coordinación de las diputaciones, Cacharro recordó que en la etapa del tripartito la Xunta llevó a cabo un intento similar, que en realidad era de control de los ayuntamientos. Él, como senador, presentó un recurso ante el Constitucional, que prosperó. «Ahora el texto ya está redactado y sólo tendremos que cambiarle las fechas», advirtió.