Lucus Nox ultima la denuncia por la cancelación del festival tecno

D.C. LUGO/LA VOZ.

LEMOS

03 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La empresa Lucus Nox está recopilando documentación para presentar una denuncia por la cancelación del festival, previsto para el sábado pasado, coincidiendo con Arde Lucus. Según Francisco Varela, uno de sus responsables, están pendientes de peritación las pérdidas y los gastos generados para organizar este encuentro de música electrónica. A falta de las estimaciones del técnico calculan que el quebranto económico, que pretende reclamar a través de la vía judicial, podría oscilar entre los 300.000 y los 500.000 euros.

Varela aseguró que el caso está en manos de un asesor jurídico. Según dijo, pretenden presentar la denuncia la semana próxima si logran cumplimentar todos los trámites.

Según Varela, la empresa Lucus Nox, formada por dos socios lucense, se creó como promotora de eventos y el festival tecno en el pazo de feiras iba a ser la primera actividad que organizaban y en la que llevaban trabajando más de un año.

El responsable de la empresa apuntó que en el festival tenían previsto concentrar a unas 6.000 personas, procedentes de diferentes puntos del Estado y que en algunos casos se iban a trasladar en autobús a Lugo. Explicó que habían concertado rutas desde Madrid, Asturias, Castilla-León y Ponferrada. Las estimaciones de público, según dijo, se peritan habitualmente a través de la venta anticipadas de entradas.

En 24 horas tuvieron que cancelar todo un montaje de un año. Según Varela tenían contratados los servicios de seguridad, el personal dado de alta en la Seguridad Social y el camión con la iluminación, el sonido y el escenario estaba aparcado a 200 kilómetros de Lugo. «El jueves por la tarde -dijo- estuvimos trabajando en el pazo y el viernes por la mañana, a las nueve, ya no nos permitieron el acceso al recinto». «A las dos y media de la tarde reclamamos los servicios de un notario y de repente aparecieron dos papeles donde se nos comunicaba la cancelación del evento».

Para Francisco Varela la cancelación del festival «solo se entiende desde el empeño de una concejala en que no se celebrase para que no nos lucrásemos del Arde Lucus».

Varela asegura que disponían de todos los permisos, incluido el de ampliación horaria. El festival estaba previsto desde las ocho de la tarde del día 26 hasta las diez de la mañana del día siguiente.