La cinta muestra a Bacon como un obrero de un barrio de Chicago, cuyo único objetivo es la manutención de su familia.
21 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.V Televisión ofrece esta noche a las 22.00 el thriller fantástico El último escalón, realizado en el año 2000 por David Koepp. Muestra a Kevin Bacon como un obrero de un barrio de Chicago, cuyo único objetivo es la manutención de su familia, al tiempo que desprecia cuanto tenga relación con los fenómenos paranormales. Un día que accede a someterse a una sesión de hipnosis, ante la seguridad de que su opinión no cambiará en absoluto. Pero ocurre lo imprevisto y le asaltarán inquietantes pesadillas hasta convertirse en sombra de lo que fue, sobre todo porque las voces que escucha le piden esclarecer un crimen de años atrás?
Koepp había debutado cuatro años atrás con la muy curiosa El efecto dominó y cuando estrenó El último escalón confirmó sus buenas aptitudes para el género, que cultivaría también en una corta filmografía de cuatro títulos hasta la fecha, entre ellos La ventana secreta, en el 2004, con Johnny Deep.
En esta ocasión recurre a elementos conocidos como son una casa maldita y un espíritu que no parece dispuesto a dejar a nadie en paz.
Sin embargo, el mérito del director está en haber logrado una atmósfera verosímil que muchos críticos compararon con la memorable El sexto sentido, estrenada pocos meses antes, aunque sea una simple coincidencia. A los tradicionales golpes de efecto, la película añade un par de momentos realmente inquietantes que evidencian a un realizador riguroso y a un actor en estado de gracia como Kevin Bacon, uno de los mejores de su generación, ayudado de un rostro singular que le hacen idóneo para registros como el del atormentado Tom Witzky, llamado para una misión en El último escalón. James Newton Howard en la música.