La atención sanitaria a accidentados de tráfico cuesta 36 millones cada año

Elisa Álvarez González
E. Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

La mayoría de los lesionados en el 2015 fueron evacuados a centros privados

02 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En el año 2015 hubo en Galicia 4.463 accidentes de tráfico con víctimas, en los que se vieron implicadas 6.760 personas, según datos de la Dirección General de Tráfico. A los 123 fallecidos en el lugar del accidente se sumaron en los treinta días posteriores otros 118, que murieron por las secuelas del siniestro. La atención sanitaria a todos los accidentados supuso un coste para las aseguradoras de 36 millones de euros, que suma el 8,4 % del conjunto de España.

Según datos de la Asociación de Hospitales de Galicia (Ahosgal), que engloba a los centros privados acreditados por el Sergas, como Povisa, San Rafael, HM Modelo o La Rosaleda, casi el 74 % del gasto se generó en centros privados, frente al 26 % en hospitales públicos. En estos casos el Sergas debe remitir la factura a las aseguradoras o a un tercero obligado al pago si el coste no tiene que asumirlo la compañía. En la práctica hay asistencia sanitaria que no se reembolsa por la dificultad de encontrar al responsable de pagar, y de hecho el Consello de Contas en el año 2014 alertó de los destacados perjuicios económicos del Sergas por no cobrar este tipo de prestaciones.

Los accidentados de tráfico se atienden en Galicia mayoritariamente en hospitales privados. Sin embargo, en el conjunto de España hay un mayor equilibrio. De los 775.000 actos médicos que se realizaron en el 2015 por la atención a víctimas, el 55 % se hicieron en la privada y el 45 % en la pública.

Libertad de elección

La Alianza de la Sanidad Privada Española y Ahosgal realizan hoy en el Colegio de Médicos de Santiago una jornada para abordar los derechos que tienen los lesionados de tráfico. Por ejemplo, un accidentado puede elegir el centro sanitario en el que quiere ser atendido hasta el final de su proceso de curación «sin que se pueda imponer la recuperación y rehabilitación en otros».

Otro tema a tratar es la incidencia que tiene en la salud de las víctimas el hecho de recibir una atención rápida, integral y de calidad en un hospital que cuente con la tecnología y los recursos humanos necesarios. En el año 2013 los hospitales concertados denunciaron el envío, por parte de las aseguradoras, de pacientes accidentados a clínicas que no contaban con la acreditación del Sergas con el objetivo de ahorrar costes, mediante llamadas en las que insinuaban no hacerse cargo del tratamiento si el paciente no acudía a la clínica indicada por la gestora. Ahosgal denunció, por ejemplo, que enfermos que trataban dejaron de acudir a sesiones de fisioterapia tras recibir llamadas desde estas gestoras, e insisten en que el paciente puede elegir hospital.