Alrededor de medio centenar de personas que permanecen acampadas en la plaza del Obradoiro llevaron su protesta al exterior de los dos accesos al recinto de San Caetano.
10 jun 2011 . Actualizado a las 10:54 h.El miércoles protestaron ante la Diputación de Ourense, que preside Baltar, con chorizos y enchufes, y ayer los indignados se movilizaron frente al complejo administrativo de la Xunta en Santiago, coincidiendo con la reunión semanal del Gobierno gallego. Alrededor de medio centenar de personas del movimiento 15-M de las que permanecen acampadas en la plaza del Obradoiro llevaron su protesta al exterior de los dos accesos al recinto de San Caetano.
Esa coincidencia del acto de protesta con la reunión del Consello de la Xunta provocó momentos de tensión entre algunos agentes de la Policía Nacional y manifestantes. Alguno de ellos tuvo que recibir atención sanitaria por contusiones. «Se pusieron nerviosos y, al intentar sacar a un par de personas, apretaron de más», explicó a la agencia Efe Cristina Sánchez, de la comisión de comunicación del colectivo 15-M. Los jóvenes manifestantes expresaron su malestar por la situación laboral y la falta de perspectivas.