Se encuentran en los concellos de Cabana de Bergantiños y Cualedro.
04 abr 2011 . Actualizado a las 17:55 h.La Consellería de Cultura e Turismo ha declarado hoy oficialmente como bienes de interés cultural en la categoría de monumento los castros de Borneiro, en el municipio coruñés de Cabana de Bergantiños, y de Saceda, en el Ayuntamiento orensano de Cualedro.
El anuncio fue formulado en el Diario Oficial de Galicia. La declaración había sido aprobada por el Consello de la Xunta a principios de marzo.
El castro de Borneiro destaca por las intervenciones arqueológicas y el buen estado de conservación de la mayoría de las estructuras existentes, que fueron los motivos principales para impulsar la declaración, lo que garantiza su conservación para evitar su pérdida, destrucción o deterioro, según la declaración.
Respecto a Saceda, su declaración se fundamentó en su carácter de ejemplo ilustrativo de un castro de la etapa inicial y de transición a la fase de apogeo de esa cultura, según la Xunta.
Destaca, además, su imponente y monumental sistema defensivo, factores que determinan una destacada significación cultural y un gran potencial para su puesta en valor.
El yacimiento de Borneiro, con 29 construcciones en un área que abarca más de 50.000 metros cuadrados, es uno de los elementos más destacados de la cultura de castros en la Costa da Morte.
La zona está situada en una pequeña colina a unos 500 metros al sur de la Iglesia de San Xoán de Borneiro, una área con una amplía visibilidad desde el litoral
El Castro de Saceda también se emplaza en una colina sobre la llanura que rodea el sur de la Serra do Larouco e históricamente la comarca fue una zona estratégicamente situada en un lugar central del convento bracarense de la Gallaecia romana, con capital en Braga-Portugal.
Asimismo, está delimitado sobre un área con peculiaridades culturales propias, fruto de una tradición de la Edad del Bronce o de la primera Edad del Hierro.
Situado en un área de casi 735.000 metros cuadrados, esa zona monumental abarca amplias calzadas enlosadas, cabañas pétreas y el sistema defensivo más exterior como son las murallas y los fosos, y su primer periodo de ocupación comenzó hace cerca de 2.500 años.