Un agente se sube al capó de un vehículo que iba en sentido contrario por la AP-9 para detenerlo

Redacción digital

GALICIA

El suceso ocurrió ayer por la tarde a la altura de Caldas de Reis y el conductor dio positivo por alcoholemia. Por otra parte, dos jóvenes han sido imputados por hacer carreras de coches en Oza dos Ríos.

24 ene 2011 . Actualizado a las 15:33 h.

La Guardia Civil de Tráfico interceptó a las ocho y media de la tarde de ayer a un coche que circulaba en sentido contrario por la AP-9 en Caldas de Reis. El vehículo, conducido por J.B.A. de 68 años, fue interceptado circulando en dirección hacia Santiago por el carril en dirección a Vigo después de recorrer unos cinco kilómetros. El conductor desobedeció las órdenes de parada que se le hicieron y obligó a uno de los agentes a subirse al capó del vehículo mientras éste todavía estaba en marcha para obligarlo a detenerse. El coche ya había causado dos accidentes con daños materiales.

El conductor arrojó una tasa positiva en el prueba de alcoholemia a la que se le sometió tras su detención.

Uno de los agentes que participó en la detención sufrió lesiones que requirieron asistencia en un centro hospitalario según informa la Guardia Civil de Tráfico de Pontevedra.

Carreras de coches en Oza

Por otra parte, la Guardia Civil Tráfico ha imputado a dos jóvenes, de unos veinte años, vecinos de Oza dos Ríos, como presuntos autores de sendos delitos contra la seguridad vial al conducir de forma temeraria poniendo en peligro la vida de otros usuarios. Al parecer, los detenidos circulaban en sus respectivos turismos haciendo competiciones de velocidad por la carretera AC-840, a su paso por el término de Betanzos.

Como consecuencia de la citada conducción, se produjo un accidente en el que colisionaron otros dos vehículos que nada tenían que ver con los imputados. Precisamente, uno de los turismos accidentados realizó una maniobra evasiva para no colisionar contra los competidores, pero no pudo evitar el impacto con otro vehículo que venía en sentido contrario, también ajeno a la competición. Afortunadamente no hubo que lamentar daños personales según informa la Guardia Civil de Tráfico.