Elude someter a votación la resolución contra los diputados debido a las fuertes reticencias de su ejecutiva
19 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.El líder del PSdeG, Pachi Vázquez, sufrió ayer el primer revés orgánico desde que se convirtió en secretario general, en abril del 2009, al no lograr el respaldo mayoritario de la dirección del partido para aprobar una resolución para excluir de las listas municipales a los diputados autonómicos que previamente no renuncien por escrito al escaño. En una tensa reunión que dividió a la ejecutiva en dos partes, los que defendían aplicar el principio de «unha persoa, un cargo» a todos por igual y los que secundaban a Vázquez para imponérselo de momento solo a los representantes en O Hórreo, el máximo dirigente socialista desistió de someter el texto a votación para evitar males mayores.
El testimonio de tres asistentes a la reunión es coincidente al atribuirle a Salvador Fernández Moreda, secretario provincial de los socialistas de A Coruña, esta frase: «O sacas esto adelante o tienes que dimitir», que habría pronunciado para respaldar a Vázquez y animarlo a ir a por todas con su resolución. «Tienes el respaldo de mi ejecutiva», insistió, mientras la ferrolana Beatriz Sestayo rebatía de inmediato a Moreda: «Eso es mentira, no la convocaste».
Voces como las de Mar Barcón, número dos del partido, y Fernández Leiceaga, portavoz parlamentario, coincidieron en pedir que se aplique la doctrina sobre incompatibilidades a todos por igual y no solo a unos pocos, lo que contribuyó a abrir de inmediato una fractura en el seno de la ejecutiva. Junto a ellos, la mayoría de los representantes de las provincias de A Coruña y Pontevedra, con la excepción de Moreda y el grupo de Vigo, afearon la posición de Pachi Vázquez, quien tuvo a favor como una piña al sector ourensano y a buena parte del de Lugo, con su secretario provincial, Ricardo Varela, a la cabeza.
Renuncia por escrito
El texto de la resolución que el líder del PSdeG hizo circular antes de la reunión proponía acordar que «aqueles candidatos ás eleccións municipais que sexan deputados no Parlamento de Galicia deberán presentar diante da comisión de listas un escrito de renuncia ao seu cargo de deputado/a, que se fará efectiva antes da súa toma de posesión como concelleiro ou alcalde». De igual modo, la resolución advertía que «a ausencia deste requisito será causa de exclusión das candidaturas».
Pues bien, el texto no fue sometido a votación ni en la comisión ejecutiva, cuya prolongación obligó ayer a retrasar una hora y media el inicio del comité nacional, ni tampoco en la reunión posterior del máximo órgano del partido. Esto fue interpretado por los dos bloques de forma diferente. Si bien dirigentes como Modesto Pose, secretario provincial de Pontevedra, entienden que no prosperó la resolución del secretario general para pedir la renuncia de los diputados antes incluso de que sean elegidos concejales, los afines a Vázquez la consideran aprobada por la vía del asentimiento, pese a que no fue votada ni en la ejecutiva ni tampoco en el comité nacional.
A última hora de la tarde de ayer, la dirección del PSdeG difundió un texto de la resolución, algo más retocado, para reiterar que era la realmente aprobada. Pero sea como sea, la brecha ha quedado abierta en la cúpula del partido y todo indica que las heridas que deja la aplicación práctica de las reglas contra la acumulación de cargos pueden tardar en cicatrizar.
A grandes rasgos, Vázquez recibió en la ejecutiva la adhesión de siete dirigentes (Ricardo Varela, Luis Ángel Lago, Moreda, López Font, Álvarez Santullano, Laura Seara y Miguel Fidalgo). Las voces a favor de aplicar para todos las reglas, y no solo para el Parlamento gallego, fueron 13: Leiceaga, Barcón, Sestayo, María Torres, Pose, Juan Jesús Ares, Carmen Gallego, Antonio Dono, Pérez Herráiz, Carlos Fernández, Dulcinea Aguín y Luis Raposo. Un tercio de los asistentes no se pronunciaron.