Marcha atrás de un absentista que alegaba exceso de actividad

La Voz

GALICIA

01 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Según Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea, ayer debían haber acudido a la terminal de Lavacolla doce controladores: cuatro por cada uno de los turnos establecidos. Aduciendo supuestos excesos de sus topes horarios del ejercicio del 2010, no obstante, de los citados por el Estado hasta cuatro no atendieron sus obligaciones laborales. Para prestar el servicio de la mañana se presentaron dos, mientras que tres hicieron lo propio por la tarde y otros tantos de noche. Y la cosa pudo llegar a ser peor, pues el pasado lunes USCA había anunciado que durante el primero de ellos solamente habría un técnico en todo el recinto. ¿Por qué al final se vio acompañado por un segundo? De acuerdo con una portavoz autorizada del ente público estatal, inesperadamente compareció un empleado que tanto en la noche del viernes como en la del sábado había alegado una superación de cupo para no ocupar su puesto entonces. «Esto demuestra que el argumento sindical no es más que una falacia. ¿Cómo alguien que sí se había pasado de las 1.670 horas hace unos días, de repente, ahora resulta que no?», declaró esta misma fuente no sin cierta ironía.

Aena, asimismo, se ratificó en las advertencias que en la jornada anterior había lanzado. Va a tomar, reiteró, «todas las medidas legales al alcance» contra los trabajadores del aeropuerto de Santiago que secunden en la torre o bien en el TMA los paros parciales, dado que estarían incurriendo, desde su punto de vista, en «infracciones graves» de lo pactado por contrato con la empresa.

Mientras negocian el convenio

Este nuevo enfrentamiento de los controladores con el Ministerio de Fomento, que pronto se extenderá a varias ciudades del país, estalló a finales de noviembre, meses después de que el departamento de José Blanco redujese a 80 por asalariado las horas extraordinarias remuneradas admisibles dentro de un mismo ejercicio, cuando anteriormente muchos cobraban por completar hasta 600. Coincide en el tiempo igualmente con la negociación del segundo convenio colectivo que Aena y USCA están llevando a cabo en Madrid.

Dentro de ese proceso, tras celebrarse ayer una reunión menos tensa de lo esperado, ambas partes podrían mantener hoy otra «de provecho», según fuentes gubernamentales no oficiales. Los informantes ven en los cierres parciales del cielo gallego un «arma de presión de ellos» para lograr mejoras sociales.