Renfe se plantea cerrar servicios que no le son rentables al perder las ayudas de la Xunta
GALICIA
Entre los enlaces en peligro figura el Vigo-Pontevedra, en el concurrido corredor hacia Santiago y A Coruña
10 nov 2010 . Actualizado a las 09:47 h.El operador ferroviario aprovechó 30 millones en subvenciones de la Xunta para mantener en los últimos 15 años los servicios que no considera rentables, pero ahora que el Gobierno gallego cierra el grifo por los recortes presupuestarios, se plantea suprimir trayectos. Aunque Renfe se mantiene a la expectativa y todavía no ha emitido un pronunciamiento oficial, la compañía advierte de que la pérdida de ese colchón de recursos públicos amenaza frecuencias en las conexiones subvencionadas: A Coruña-Monforte-Ourense, A Coruña-Ferrol, Ourense-Puebla de Sanabria y Pontevedra-Vigo.
Renfe aduce que está negociando con la Xunta, y se aferra a que «oficialmente» no le ha comunicado nada. En todo caso, sostiene que en el debate sobre esos servicios también será crucial la decisión que adopte el Ministerio de Fomento sobre las líneas que podrán ser subvencionadas. El departamento de José Blanco diferenciará entre servicios comerciales y aquellos que, sin ser rentables, tendrán la condición de públicos. Fomento discriminará qué líneas deficitarias podrán recibir subvenciones y cuáles quedarán a expensas del mercado. En el caso de Galicia, Renfe arguye que ese mapa le permitirá concretar en qué trayectos contará con ayudas, para decidir después si mantiene o suprime determinadas conexiones y frecuencias.
Pese a las cautelas de la empresa, su punto de vista es claro: sin subvención, Renfe no mantendrá la oferta que ahora presta en Galicia. Tras la última actualización del convenio, que el bipartito negoció en el 2007, la Xunta pasó de subvencionar 84 servicios semanales a 150: 66 entre A Coruña y Ferrol, 24 entre A Coruña y Monforte, 14 entre Ourense y A Mezquita, 42 entre Pontevedra y Vigo, y 4 entre A Coruña y Ourense. Resulta llamativo que Renfe esté ingresando recursos públicos por el servicio Pontevedra-Vigo, que está en la línea más concurrida de Galicia. El actual Ejecutivo cree que, al incluir en el convenio del 2006 tres lanzaderas entre esas ciudades, la Xunta anterior quiso alentar a Renfe a poner en marcha servicios de cercanías.
Aunque la decisión del Gobierno de Feijoo de cortar las ayudas a Renfe quedó solapada por la mayor repercusión política de la supresión de la subvención del Noitebús, la Xunta tiene claro que los resultados obtenidos no justifican su continuidad en unos Presupostos que recorta en 1.200 millones y que deben neutralizar un déficit de 395 millones para garantizar las prestaciones básicas.
42 euros por un viaje de 6,50
El balance desde el primer acuerdo que la Xunta suscribió con el operador, en julio de 1995, revela que el volumen de viajeros transportados en las líneas subvencionadas ha experimentado en general una recuperación, aunque sin llegar a las cifras de finales de los noventa. Pero los datos del primer trimestre de este año muestran caídas respecto al mismo período del 2009, con un 10,6% menos en la conexión A Coruña-Monforte-Ourense y un 13% entre Pontevedra y Vigo. La Xunta esgrime también el alto coste por viajero de los servicios subvencionados. Cada usuario del trayecto Ourense-A Mezquita supone una ayuda de 41,8 euros, cuando el precio del billete es de 6,50.