Sabemos menos que ayer

Xosé Carlos Fernández Díaz

GALICIA

02 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Tras el envío de los Presupuestos al Congreso este jueves caben hacerse algunas preguntas. ¿Sabemos realmente qué se va a hacer con nuestro dinero en el 2011?. Es más, ¿sabemos qué se hizo con ellos en el 2008, en el 2009, o qué se está haciendo en el 2010? Dudoso quien afirme saberlo y seguramente certero quien afirme que no lo conoce ni el propio Gobierno. Analicemos los presupuestos para el ferrocarril gallego. Es de sentido común programar el gasto del año que se iniciará el 1 de enero, a partir del estado en que presumiblemente se encontrarán las obras el 31 de diciembre. ¿Quién lo sabe? Invito al ministro de Fomento a notificárselo a los diputados para ayudarlos a decidir. Si no, votarán en barbecho. Fomento usa nuevos trucos y escamotea a los ciudadanos los conejos más vistosos de la sesión. ¿Se van a paralizar las obras del AVE de Galicia? Si solo vemos los Presupuestos, se puede afirmar que sí. Pero resulta que en el horizonte se nos plantea un plan público-privado para financiar el AVE gallego del que no sabemos nada.

Examinen y vean qué dicen los Presupuestos. Seguiremos un año más, y van 11, con las obras del eje atlántico. Seguiremos incrementando los casi 3.000 millones de coste «presupuestario» de la línea Ourense-Santiago, que va por el doble de lo realmente ejecutado. Seguiremos haciendo estudios para ir de Ourense a Vigo haciendo turismo; estudios para mejorar la serpenteante, dura y más que centenaria línea de Ponferrada a Monforte por el Sil; para ir algún día de Ourense a Lugo en tren; para que algún día los puertos exteriores de Ferrol y A Coruña tengan ferrocarril.

Pero del posible avance de las obras para la llegada del AVE en el 2015, o cuando sea, cuyo coste aproximado según la documentación presupuestaria rondará los 5.980 millones de euros, los Presupuestos lo despachan con 87 millones en Galicia y 150 en Castilla y León. Entonces, si no sabemos en dónde estamos en cuanto a ejecución, y lo pendiente «no va a figurar en los Presupuestos que aprobarán las Cortes», ¿para qué vale tanto esfuerzo informativo? ¿Qué utilidad tienen las comparaciones entre ejercicios heterogéneos? ¿Para qué alabar o rasgarse las vestiduras por las cifras? En mi opinión, sobre el AVE de la Meseta, hoy sabemos menos que ayer y más que mañana.