Cuarto incendio en dos meses en el club lucense Eros

La Voz LUGO/LA VOZ.

GALICIA

Los incendiarios actúan de día y prácticamente a la misma hora.

01 sep 2010 . Actualizado a las 14:11 h.

Cuarto incendio. Segundo en cuarenta y ocho horas. El club de alterne Eros, de Lugo, uno de los que forman parte de la red de la operación Carioca, volvió a arder en la mañana de ayer y pone en evidencia a la policía que, hasta ahora, no localizó a los culpables. Estos actúan de día y prácticamente a la misma hora. Una mínima vigilancia en el establecimiento permitiría dar con al autor de los hechos y, lo que es más relevante, saber cuáles pueden ser las razones de su actuación.

El burdel de Garabolos comenzó a arder a media mañana de ayer. De nuevo los vecinos vieron salir humo y llamaron a los bomberos, que últimamente ya están acostumbrados a intervenir en el establecimiento que en su momento fue precintado por decisión judicial.

Todo apunta a que esta vez el incendio comenzó en la segunda planta del edificio, en una de las habitaciones de la parte de atrás. Por una de las ventanas comenzó a salir humo, lo que provocó la activación de los servicios de emergencia. Los bomberos desplazaron un coche cisterna y otros medios. En una hora aproximadamente controlaron la situación. De nuevo tuvieron que utilizar equipos autónomos para poder respirar dada la toxicidad del humo.

El Eros está parcialmente calcinado, pero quedan todavía algunas partes por arder. Los incendiarios actúan siempre por las mañanas y no demasiado temprano. La vez que más madrugaron fue a las nueve de la mañana. Por lo general, prenden fuego entre las once y las doce horas. Pese a estas circunstancias, la policía no da con los autores, entre otras razones porque no hay ningún tipo de vigilancia. Ayer, cuando se marcharon los bomberos y los agentes de policía, cualquier persona podía acceder al recinto y volver a incendiarlo.

El club de alterne ardió dos veces en el plazo de diez días en el mes de julio. El pasado domingo por la mañana no solo lo volvieron a incendiarlo, sino que intentaron también que explotara una bombona de butano que llevaron a propósito al lugar.