Una polémica que surgió hace casi un año con la designación de profesores para las prácticas
SANTIAGO CIUDAD
Acababa de inaugurarse el curso 2009-2010 cuando la Universidade da Coruña puso el grito en el cielo. Según su versión, la institución académica compostelana había ignorado un protocolo firmado el año anterior para la designación de profesores asociados, un texto que exigía la participación de las tres universidades para tomar dicha decisión. ?La respuesta de la Universidade de Santiago no se hizo esperar. Esgrimió durante meses el argumento de que dicho protocolo no se había desarrollado y que, con el curso ya iniciado, se vio en la obligación de convocar plazas para poder impartir docencia a los alumnos que iniciaban el ciclo clínico ese año. La batalla, a la que pronto se sumó la Universidade de Vigo, se saldó con la firma de un acuerdo que dejaba abierta la puerta a descentralizar la titulación.