El proyecto de plan de financiación se ajustará a las directrices del ministerio y será votado este mes

La Voz

GALICIA

07 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La tasa de colocación de las universidades gallegas será uno de los indicadores que se tendrán en cuenta para aportar más o menos recursos a las instituciones académicas dentro del plan de financiación que actualmente está en fase de borrador. Así lo adelantó ayer el secretario xeral de Universidades, José Alberto Díez de Castro, quien añadió que la Axencia para a Calidade do Sistema Universitario de Galicia tendrá una partida específica para evitar presiones tanto por parte de los Ejecutivos como de las universidades.

En todo caso, el borrador del nuevo plan de financiación para el SUG está discutiéndose ya en la comisión de financiación, una asamblea delegada del Consello Galego de Universidades, que tiene la última reunión prevista para mediados de este mes. Unos días después, y antes de que acabe el mes de julio, el propio Consello Galego de Universidades votará todas las propuestas relativas a un plan que, según adelantó el secretario xeral de Universidades, se ajustará a las directrices dadas por el Ministerio de Educación el pasado mes de abril.

Queda pues definido a grandes rasgos el modelo de financiación que regirá en los próximos años. El ministerio afirma en el documento que es hora de apostar por la dotación de recursos vinculados a objetivos relacionados con la docencia, la investigación, la transferencia del conocimiento y la responsabilidad social, entre otros asuntos. En esta parte variable es donde entra la tasa de colocación de los titulados. Además, José Alberto Díez de Castro afirmó que «agora estamos a reducir o número de indicadores dunha primeira tanda, que era moi elevada, e imos reducila a un máximo de 20 indicadores».

Inversión estructural

En todo caso, desde el Gobierno central también apuntan en el documento citado por Díez de Castro que hay que garantizar el funcionamiento básico de las universidades con una parte fija dentro del plan de financiación. La Universidade de Santiago lleva tiempo reclamando que, por su carácter histórico y mayor carga de personal, el Ejecutivo autonómico les proporcione un porcentaje mayor de financiación estructural que a las otras dos universidades. Díez de Castro aseguró que desde la Xunta tratan de «atopar consenso entre as universidades», ya que tanto las instituciones de Vigo y A Coruña han puesto sobre la mesa «unha petición similar baseada noutros motivos».

El tira y afloja de la negociación del plan de financiación «ten tres prismas», según el representante autonómico, y «ao que di unha universidade respóndelle a outra usando un criterio diferente», por lo que la posición del Ejecutivo gallego será la de «atopar o equilibrio» y tratar de que «non haxa discriminacións e todas reciban os recursos necesarios para desenvolver o seu labor docente e investigador de maneira axeitada».

Además, y según las recomendaciones del ministerio, informadas «favorablemente por todas as universidades e comunidades autónomas», el nuevo plan deberá contemplar la relevación creciente de las actividades de investigación y desarrollo, así como las transformaciones en curso en la oferta docente como consecuencia de la adecuación a Bolonia, entre las que resaltan el reconocimiento de la mejora docente del PDI y la adecuación de los espacios físicos de las instituciones académicas a las nuevas metodologías docentes.

Y en cuanto la crisis haya pasado y los recursos públicos crezcan, el ministerio insta a los Gobiernos a tender a una financiación pareja a los sistemas universitarios de otros países: el 1,5% del PIB.