La Guardia Civil investiga amenazas a 20 alumnos de un centro de Nigrán

GALICIA

El acosador coacciona a sus víctimas con fotos hechas en el comedor y les pide dinero bajo la presión de una paliza

15 abr 2010 . Actualizado a las 11:44 h.

La Guardia Civil ha abierto una investigación para tratar de identificar al autor de las amenazas que desde hace más de una semana vienen recibiendo a través de una red social de Internet alumnos de primero y segundo curso de la ESO del colegio público de Panxón, en Nigrán.

El caso ha generado una enorme preocupación entre los padres y muchos adolescentes están atemorizados por los mensajes cargados de sadismo, imágenes truculentas e insultos que han aparecido en las bandejas de entrada de sus cuentas del Messenger, una red que permite a los usuarios estar interconectados a través del ordenador.

Hay alrededor de una veintena de chicos y chicas de entre 12 y 14 años de edad que han sido víctimas de este tipo de acoso. Los padres comenzaron esta semana a presentar denuncias en el puesto de la Guardia Civil de Baiona, pero desde hace dos días los jóvenes no han vuelto a registrar más amenazas en sus ordenadores.

Los responsables del centro creen que no se trata más que de una gamberrada de muy mal gusto, pero los progenitores quieren que se investigue hasta dar con el responsable de estos actos, alarmados por otros casos de violencia juvenil que durante las últimas semanas han saltado a las portadas de todos los periódicos del país.

Todas las sospechas indican que el anónimo agresor cibernético es una persona del mismo entorno de los estudiantes afectados, dado que conoce la forma de localizarlos a través de Internet, y los mensajes están dirigidos personalmente a cada uno de ellos. En sus misivas denota por algunos comentarios que conoce las circunstancias particulares de sus víctimas, según afirmaron fuentes del entorno escolar.

Fotografías

Los alumnos han recibido incluso fotografías suyas tomadas probablemente con teléfono móvil mientras estaban en el comedor del colegio dentro de su jornada escolar.

El agresor ha pedido dinero a sus víctimas en sus mensajes amenazantes. Así, requería a los jóvenes que depositaran cada día de la semana billetes de cinco euros en el invernadero del centro, que está ubicado en el lugar más apartado del recinto escolar. En caso contrario, los amenazaba con darles una paliza con un bate de béisbol. Ninguna de las víctimas ha accedido a pagar dinero, a pesar de que alguno llegó a pedírselo a sus padres para poder vivir tranquilo.

Algunas chicas recibieron fotografías con cuerpos mutilados e imágenes con puñales de gran impacto, que fueron enviadas con la más probable intención de provocar angustia. Los insultos no han sido dirigidos solo a ellos, sino también al resto de sus familiares. En la ventanilla del coche de uno de los padres también han aparecido descalificaciones escritas con el dedo sobre el polvo.

Sembrar el miedo

El individuo se presenta ante sus víctimas como hacker y ha conseguido sembrar el miedo entre los jóvenes. La mayor parte de ellos pertenecen al primer curso de la ESO, aunque también hay algunos alumnos de cursos superiores. La Guardia Civil continuaba ayer recibiendo el goteo de denuncias de padres alarmados.