En Crecente han dotado de un peculiar sistema de protección a un cruceiro de pedra.
02 feb 2010 . Actualizado a las 21:38 h.Los amigos de lo ajeno han dado muestra a lo largo de estos años de su capacidad para expoliar el patrimonio artístico gallego. Piedras de castros, hórreos o cruceiros han sido sustraidas por los cacos y han acabado en muchas fincas privadas.
En Crecente, para prevenir robos, han optado por enrejar este ejemplar, según la foto que nos envía la internauta Amelia Paderne.