La Xunta quiere tener cerrado el acuerdo con los tres rectores a finales de este mes
15 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.El consenso ha llegado a todos los rincones de las tres universidades, hasta el punto de que al que durante los últimos meses se convirtió en el principal conflicto entre los rectores de los últimos años -la polémica sobre las plazas de profesores que imparten docencia clínica en Medicina- le quedan unos flecos para convertirse en agua pasada.
Los tres rectores presentaron ayer a representantes de Sanidade y Educación un documento con propuestas para desarrollar cómo se hará la docencia del segundo ciclo de la titulación de Medicina. La Xunta, por su parte, consensuó otro texto con dieciocho puntos, en los que también se recogen los principios generales del futuro acuerdo para impartir esta docencia, que abarca todas las titulaciones del área de la salud.
Xunta y universidades se han comprometido a redactar un documento en el que se recojan los principios de ambas propuestas, y a cerrar el acuerdo definitivo a finales de este mes de enero. En general, las bases que quedaron claras en el encuentro es que se firmará un convenio marco y otros específicos entre la Universidade de Santiago y las de A Coruña y Vigo. Estos acuerdos pretenden ser más eficientes en la organización de los recursos tanto de las universidades como de los hospitales, «abríndose un novo marco de colaboración a nivel docente entre as universidades galegas, sen que isto supoña un menoscabo da autonomía de cada universidade».
En la práctica -y en línea con el acuerdo de colaboración que presentaron los rectores el miércoles- esto supone compartir los profesores que impartan la docencia clínica de Medicina, sea cual sea su universidad de origen. Fuentes académicas aclaran que la intención es que un profesional, de cualquier universidad, pueda impartir clases clínicas en cualquier hospital que lo precise, una situación que se ampliará a todas las carreras del área de la salud.