La Xunta carece de presupuesto para poder equipar ocho guarderías

GALICIA

El mobiliario necesario para poner en marcha la de Culleredo está presupuestado en 67.100 euros

14 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La falta de fondos para muebles y cocinas es uno de los principales obstáculos que impiden en estos momentos la entrada en funcionamiento a principios de este curso de un total de ocho guarderías públicas. Son algunas de las anteriormente denominadas galescolas, que están repartidas por todo el territorio gallego.

Los datos que maneja el Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar, dependiente de la Consellería de Traballo, muestran cómo, con fecha 28 de agosto, carecían de crédito disponible para ser equipados los centros de Ares, Cangas, Cotobade, Silleda, Vilagarcía, Marín, Foz y Ferrol-Caranza. La última estaba, al mismo tiempo, pendiente de la tramitación del convenio de gestión por parte del Ayuntamiento y del acondicionamiento exterior de sus instalaciones, una obra que también tiene que acometer el Concello.

Esperar al año próximo

Fuentes del Consorcio Galego de Servizos de Igualdade reconocieron que no había presupuesto suficiente para poder equiparlas. La razón aducida desde ese departamento de la Xunta fue que las partidas de fondos se adjudican cada año, por lo que ahora habrá que esperar a los presupuestos del ejercicio que viene para poder poner muebles en las guarderías.

De hecho, la previsión que consta por escrito en la documentación que maneja el Consorcio apunta que todas tienen prevista como fecha de apertura el primer trimestre del 2010. Pero las ubicadas en Ares, Silleda y Vilagarcía de Arousa también están todavía pendientes de ser recepcionadas por el municipio correspondiente.

Lo que todavía no han estimado es cuánto dinero precisarán para equipar todas esas guarderías.

En cambio, lo que sí tienen contabilizado es cuánto han tenido que dedicar a otras tres escuelas que tampoco tenían fondos para el mobiliario, pero que han logrado obtenerlo de otras partidas. En esos casos, lo que se realizó fue adjudicar los contratos para ponerles todos los servicios necesarios (mesas, asientos, cocina, percheros...) con créditos liberados de montantes que estaban destinados a otros cometidos. El problema, tal y como explicaron fuentes del Consorcio, es que con las otras ocho no pueden hacer lo mismo, ya que no hay en los presupuestos actuales, aprobados por el bipartito, otras partidas de donde liberar fondos.

Las escuelas infantiles que lograron presupuesto para apremiar su apertura son las del concello coruñés de Culleredo, la de Ourense-Colon, la de Santiago-Tambre y la ubicada en Doantes, en Porriño. La primera pudo obtener 67.100 euros; la segunda, 49.331,78; la tercera, 51.988,81, y la última contó con 53.535,68 euros.

Aunque el presupuesto que hay que dedicar para equipar cada una de las guarderías varía en función del centro, la media hallada a partir de lo que se ha destinado para las cuatro anteriores muestra cómo cada una podría precisar en torno a una media de 55.489,07 euros. Por lo tanto, el presupuesto que es necesario para cubrir las ocho guarderías públicas que faltan y poder empezar el curso escolar de inmediato rondaría los 443.912,56 euros.