El alto comisionado festeja el 25 aniversario reuniendo en Santiago a defensores del pueblo de toda España
23 jun 2009 . Actualizado a las 02:04 h.La presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, hizo ayer una encendida defensa de la figura del Valedor do Pobo y de los asuntos que aborda, y emplazó al Gobierno de la Xunta y a los demás poderes públicos a que atiendan las recomendaciones e informes de la institución por entender que es una «obligación legal» de las Administraciones, pero también una «responsabilidad moral» de los gobernantes. La jefa del Legislativo envió este recado al Ejecutivo en unas jornadas que se celebran en la Casona do Hórreo coincidiendo con el 25 aniversario del Valedor, lo que permitió concentrar en Santiago a los defensores del pueblo de toda España.
En el discurso inaugural de las jornadas, Rojo convino que el Valedor do Pobo es una institución que tardó en abrirse camino en Galicia -la ley de creación data de 1984, pero el primer comisionado no fue nombrado hasta 1990-, pese a lo cual esta figura ha jugado «un papel ciertamente destacado» en la correcta aplicación del corpus normativo de la comunidad o en la defensa de los derechos y libertades individuales.
Las quejas relacionadas con las esperas sanitarias, la escolarización, las expropiaciones, los derechos lingüísticos y, más recientemente, la lenta aplicación de la ley de dependencia han estado presentes tradicionalmente en los informes del Valedor, como ayer subrayó Rojo, al apuntar que el contenido de las quejas «constituye una radiografía sumamente fiable» de la realidad social ante la que deben reaccionar los poderes públicos.
Las jornadas convocadas por el Valedor do Pobo pretenden abrir una reflexión sobre el papel de una institución creada por primera vez en Suecia hace 200 años con el nombre de Ombudsman . De este modo, los defensores analizarán la evolución histórica de los derechos, la consolidación de estas figuras en España, así como el papel que debe desempeñar un representante que está a medio camino entre la política y la Justicia.
«Potencial enemigo»
A ese papel se refirió también en su breve intervención inaugural el propio valedor, Benigno López, quien destacó el perfil eminentemente «objetivo e imparcial» de la institución, cualidades que, en su opinión, reforzaron la consideración de esta figura entre los ciudadanos, provocando en ocasiones que los defensores del pueblo sean vistos por los políticos como un «potencial enemigo».
El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, completó el chequeo a estas instituciones, poniendo énfasis en el «papel garantista» y en el servicio ciudadano que caracteriza a la institución, vaticinando además que las defensorías «serán cada vez más poderosas» en España. Sobre Galicia ofreció Múgica su particular visión, al remarcar la tradición no escrita de convertir en defensores siempre a ex magistrados del Tribunal Superior de Xustiza. «Es como en Israel, que todos los defensores son hijos de judíos alemanes».
Uno de los escasos contrapuntos críticos que también afloró ayer en medio de los actos conmemorativos del 25 aniversario del Valedor fue la postura expuesta por el Movemento polos Dereitos Civís (MpDC), que consideró las jornadas celebradas en la Cámara autónoma como un «acto de complacencia» ya que, a juicio de este colectivo, la institución ha demostrado «ineficacia» y estar más «inclinada» hacia las Administraciones que hacia el pueblo en la resolución de conflictos.