El actual conflicto lingüístico, tema del examen de gallego en la selectividad

SELECTIVIDAD

Unos 8.000 alumnos iniciaron las últimas pruebas del sistema Logse

18 jun 2009 . Actualizado a las 02:44 h.

Más de 8.000 alumnos gallegos empezaron ayer la selectividad, una prueba que no fue ajena a la actualidad. Arrancó el examen de Lengua Castellana y Literatura, con José Antonio Marina y el amor en una opción, y Javier Marías y los blogs en otra. A media mañana llegó Lingua Galega e Literatura, y con ella el conflicto lingüístico.

Una de las preguntas de este examen fue exactamente O conflito lingüístico. D efinición, causas e consecuencias. Un punto que los estudiantes que hayan estado atentos estos días a los medios de comunicación sumarán con facilidad. En la otra opción la pregunta era A normalización lingüística do galego. Estado actual e perspectivas da lingua galega . Los profesores aseguran que en la selectividad siempre cae una cuestión sobre sociolingüística en el examen, y en este caso la actualidad ha marcado esa pregunta.

Los estudiantes se enfrentaron además en la misma prueba a un texto publicado en La Voz de Galicia en octubre del 2007. Se trataba de un artículo de María Canosa en el que se abordaba otro tema de rabiosa y triste actualidad: el alcohol, los menores y la conducción. En la otra opción, con Xavier Queipo, la inmigración. Está claro que los autores de las pruebas han tenido presente la realidad en esta convocatoria. En la primera jornada de la selectividad los alumnos se examinaron además de la composición de un texto histórico o filosófico y de la lengua extranjera. En el primero de ellos destacó la vuelta del clásico Platón tras cuatro años sin que cayese. En el texto histórico, la desamortización de Mendizábal y la dictadura de Primo de Rivera.

Los responsables de las pruebas destacaron la tranquilidad del primer día, pese a que había temor a retrasos por la tractorada de los sindicatos agrarios. Los estudiantes terminan mañana los exámenes, pero tendrán que esperar al 29 por la noche para las notas provisionales.

Más asequible

A primera hora de la tarde de ayer había ya pocos nervios en las facultades. Tras dos exámenes, los alumnos comprobaron que la selectividad no es tan coco como pensaban. Alicia Bellón y Mariña Bouzas, del instituto Xelmírez, de Santiago, se examinaron en la sede de la Facultade de Dereito. Esperaban algo más complicado, porque en el centro educativo les daban numerosas recomendaciones sobre las pruebas, pero estas las sorprendieron positivamente.

La audición de inglés, pese a que solo sirve para subir nota, era lo que más las asustaba, aunque las dos alumnas aseguraban estar tranquilas. Eso sí, en el aula había oraciones, santos, dinosaurios de amuletos... «E a min a miña tía púxome unha vela», dice Alicia. Copiar, copiar, no, pero comentar algo con un compañero, asegura, no es difícil.

En el jardín del campus sur de Santiago, Ángel, David y Brais descansan y reponen fuerzas. Estudian en el instituto Félix Muriel, de Rianxo. Por lo que dicen, también están tranquilos. No hubo anécdotas en su primera jornada, aunque su profesora llegó algo tarde. Saben que el año que viene cambiará la selectividad, y de hecho prefieren la nueva. «Non é o mesmo examinarte de tres materias da túa modalidade [como actualmente], que facelo dunha», explica Brais.

Lo cierto es que la tranquilidad del primer día se ve respaldada por las cifras. El año pasado casi nueve de cada diez presentados aprobaron las pruebas.