La Xunta no abrirá las sedes de Lisboa y Bruselas anunciadas por Touriño

GALICIA

El Ejecutivo precisa que el cambio de la oficina de Buenos Aires no alterará sus objetivos ni su estatus

11 jun 2009 . Actualizado a las 13:49 h.

Mudanza en la política exterior de la Xunta. Los cambios impulsados por Feijoo en aras al criterio de ahorro con el que viste todas sus decisiones van más allá del traslado de delegaciones a centros de la emigración. El nuevo Gobierno descarta seguir el plan de Touriño para extender la red de «embaixadas» a otras capitales extranjeras de interés estratégico para Galicia, y no abrirá las oficinas que anunció el ex presidente en Bruselas y Lisboa. Además de invocar la austeridad, el Ejecutivo del PP aduce que la representación de la comunidad ya está plenamente garantizada.

La primera medida adoptada por Feijoo afectó a las instalaciones que su predecesor inauguró en la primera semana de octubre del 2007 en Buenos Aires, con el cese de María José Porteiro como delegada y la confirmación del cierre de esas dependencias y su traslado al Centro Galicia. La Xunta esgrime que el cambio permitirá rebajar a 430.000 euros el coste global de su sede argentina, cuya factura para este año ascendía a 860.000.

El traslado de la oficina ha provocado la misma reacción crítica en el PSOE que hace dos años suscitó su apertura en el PP. Los socialistas consideran que la operación está inducida por intereses políticos, al llevar la delegación a una entidad privada. En la Xunta replican que la objeción carece de fundamento, porque el ahorro no implicará cambio alguno en los objetivos y en el estatuto jurídico-político de la delegación, que no se convierten en entidades privadas. También se mantendrán sus funciones de estimular el comercio, captar inversiones y promover la cultura gallega y el turismo.

El Gobierno de Feijoo aplicará en la delegación de Montevideo la misma solución acordada para la sede bonaerense, con su trasvase a dependencias de un centro gallego. De nuevo, prima el objetivo de recortar costes. La sede de la capital uruguaya, que tenía al frente en calidad de secretario xeral a Joaquín Buergo del Río, aunque bajo la dependencia política de Porteiro, dispuso el año pasado de un presupuesto de 212.000 euros y cuenta con una previsión de gasto para este ejercicio de 480.000.

Fundación Galicia Europa

En el caso de la sede prevista por Touriño en Bruselas, la Xunta del PP se encontró a su llegada con un inicio de procedimiento para su apertura, pero ha descartado su ejecución. Advierten en el Gobierno que, del mismo modo que en las delegaciones americanas, esa decisión no implica una renuncia a la representación gallega, que en la capital belga ya está garantizada por la Fundación Galicia Europa. El nuevo Ejecutivo pretende reforzar su papel y su capacidad para actuar como lobby gallego.

Tampoco entra en los planes del Gabinete de Feijoo abrir una delegación económica en Lisboa, una posibilidad que Touriño anunció en enero en la capital portuguesa. La hoja de ruta de la Xunta en política exterior contempla el compromiso de potenciar la Comisión Galicia-Norte de Portugal y relanzar el plan estratégico de la eurorregión para su modernización. Feijoo llevará esos asuntos en la agenda de la reunión que mantendrá en las próximas semanas en Oporto con representantes de la eurorregión.