El número de muertos en las carreteras gallegas bajó un 24%, pero subió un 19% en las ciudades
GALICIA
Las iniciativas puestas en marcha para poner freno a la siniestralidad en las carreteras parecen estar surtiendo efecto en Galicia. Los datos provisionales correspondientes al 2008, presentados ayer en A Coruña por el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras, y el coordinador de la Dirección General de Tráfico (DGT) en la comunidad, Pedro Pastor, muestran cómo el número de víctimas mortales registradas durante ese período fue de 194, lo que implica un descenso del 23,6% en relación al año anterior, cuando se contabilizaron 254. No ha ocurrido lo mismo en el caso de las zonas urbanas, donde el número de muertos creció un 19,5% al pasar de 33 en el 2007 a 41 durante el año pasado.
Una de las razones que pueden explicar ese incremento es que, según Pastor, en carretera «el conductor está más concienciado, pero dentro de la ciudad se suspende esa precaución». De hecho, dio el dato de que el 20% de los accidentes mortales se producen a menos de cinco kilómetros del lugar en el que vive el conductor.
Atropellos
Frenar el índice de atropellos es otro de los grandes objetivos de la DGT. Aunque el número de peatones fallecidos se ha reducido en Galicia un 43,7% en el 2008 en relación al ejercicio anterior, lo cierto es que España, explicó Pastor, es uno de los Estados de la UE en los que se registran más accidentes de este tipo. En este sentido, matizó que «llegará un momento en el que también habrá que multar a los peatones que no respeten la normativa de circulación».
Lo que también se redujo el año pasado fue el número de víctimas mortales en accidentes de moto, al pasar de 44 en el 2007 a 27 en el 2008. El descenso, de un 38%, también se extendió a los menores de 24 años, aunque en este caso la bajada fue menor al alcanzar solo un 22,2%.
Según el balance provisional de Tráfico, los meses de verano han dejado de ser los que registran un mayor número de víctimas. Así, el año pasado fue octubre el período más negro en las carreteras gallegas, al contabilizarse un total de 25 muertos.
Tras los buenos resultados del 2008, la DGT pretende continuar reduciendo el número de accidentes, víctimas mortales y heridos de gravedad. El objetivo es que la cifra baje un 50% en el horizonte del 2010. Agilizar la notificación de las multas y su ejecución, notificar las sanciones a través del móvil, establecer juicios rápidos, desarrollar un plan especial para motocicletas, realizar controles de consumo de drogas parecidos a los que ya se hacen con el alcohol o extremar la vigilancia de ciertas acciones como la instalación de métodos antirradar en los coches son parte de las medidas que la nueva normativa que tramita el Gobierno central pretende poner en marcha para que Tráfico pueda continuar con sus objetivos. El Ejecutivo central, según explicó el coordinador de la DGT en Galicia, Pedro Pastor, espera poder aprobar la norma a mediados de año y podría entrar en vigor al final del ejercicio.
Entre las novedades que incluirá la normativa están las multas para vehículos que tengan instalado un control para ver dónde hay radares. Estas ascenderán a 6.000 euros y supondrán la retirada del carné durante tres meses. Al mismo tiempo, aquellos talleres que instalen ese tipo de aparatos estarán expuestos a sanciones de 30.000 euros.
Otro de los asuntos en los que está trabajando Tráfico es en la búsqueda de un «método sencillo» que permita realizar las pruebas de control de consumo de estupefacientes, según explicó Pastor. «Hay un aparato bastante perfeccionado. [...] Habría que buscar », matizó.
Con el nuevo método de detección de consumo de drogas, los agentes evitarán que los conductores tengan que ir a un centro hospitalario para hacerse una prueba.