El Valedor alerta de que la lengua es cada vez más «obxecto de conflito»

D.?S.

GALICIA

Apela a la responsabilidad de la clase política para que prevalezca la armonía entre el gallego y el castellano

13 nov 2008 . Actualizado a las 18:43 h.

Se quejan los padres, los profesores y algún que otro alumno. Unos denuncian que el castellano está cada vez más relegado en el sistema educativo gallego y los otros sostienen justo lo contrario. También protestan ciudadanos que reciben cartas de la Xunta escritas únicamente en español, situación que se repite con quienes reciben las comunicaciones redactadas solo en gallego. El Valedor do Pobo, Benigno López, advirtió ayer de que la lengua, o mejor dicho, la cohabitación entre los dos idiomas oficiales en Galicia, se está convirtiendo cada vez más en un «obxecto de conflito» y apeló a la «responsabilidade» de los agentes políticos y sociales para recuperar el consenso lingüístico y hacer que prevalezca la «harmonía característica de Galicia».

Benigno López compareció ayer ante el pleno del Parlamento para explicar el contenido de la memoria del Valedor do Pobo del 2007, en la que se da cuenta de la tramitación de 2.280 quejas. Buena parte de ellas, un total de 160 expedientes, están relacionadas con la cultura y la política lingüística, casi tantas como las denuncias que atañen a la sanidad (173), la educación (182) o el urbanismo y la vivienda (195).

El alto comisionado de la Cámara destacó que tanto la Constitución como el Estatuto de Autonomía reconocen la «realidade plurilingüe» de Galicia, lo que en su opinión comporta «o mandato para todos os poderes públicos» de fomentar el conocimiento y protección tanto del gallego como del castellano.

Llamamiento político

No obstante, destacó que en el último año se apreció una «tendencia» a promover que las cuestiones relativas al idioma sean «obxecto de conflito», motivo por el cual hizo un llamamiento a la clase política para retirar estas cuestiones de las pugnas partidarias. Benigno López se reservó este mensaje para el tramo final de una intervención que se prolongó por espacio de 50 minutos, sin quedarse a atender la réplica de los grupos políticos, pues decidió escucharla desde su oficina en un edificio cercano al Pazo do Hórreo a través del canal parlamentario.

Aun así, no abandonó el hemiciclo sin poner de relieve que el mayor número de las quejas tramitadas por la institución en relación a la política lingüística atañen a la Consellería de Educación, lo que parece indicar que el decreto que regula el uso del gallego en las aulas -y la instrumentalización que de él se hizo- fue uno de los desencadenantes de esta confrontación.

Tanto el diputado popular Agustín Baamonde como el socialista Francisco Cerviño optaron por pasar de puntillas por este asunto, sin aludir a la preocupación expuesta por el Valedor acerca del idioma. Sí se pronunció el nacionalista Iago Tabarés, al calificar de «ilustrativas» las quejas elevadas al alto comisionado por algunos ciudadanos por recibir comunicaciones de la Xunta escritas únicamente en gallego.

En opinión del diputado ourensano del BNG, esta circunstancia pone en evidencia la «necesidade» de impulsar desde la Administración autonómica una verdadera política de normalización lingüística, distinta a la que se desarrolló con los Gobiernos del PP, para que los gallegos adquieran la competencia para usar su lengua propia.